El boom de los comisionistas

| 1 DICIEMBRE 2015 | ACTUALIZADO: 1 DICIEMBRE 2015 8:40

Las agencias siguen rodeándose de personajes influyentes para tener acceso a clientes inalcanzables. Lo que les ha pasado a los de Publicis y Zenith con Bankia ha sido un error de cálculo. Si no hubiera estado en medio Rodrigo Rato nada habría pasado. Pero el riesgo cero nunca existe, eso está claro. Mezclar negocios y política no suele traer oficio ni beneficio.

Pues bien, me cuentan algunos amigos que algunas importantes agencias siguen rodeándose y codeándose con personajes de dudosa reputación. Todos tenemos un pasado y los bajos de las alfombras también hablan.

Es comprensible que las agencias de Barcelona que aterrizan en la capital no tengan más remedio que acudir a un “padrino” que les abra paso en esta selva. Los que no lo consiguieron tuvieron que hacer las maletas y volverse por donde vinieron. Antes del éxito del veloz AVE, era el Puente Aéreo.

La crisis ha multiplicado la aparición de “conseguidores”, ex directivos de importantes marcas transformados en caros comisionistas. Algunos han preferido llamarles “asesores” para dotar al puesto de un poco de dignidad. Pero no nos engañemos, estos “ex” son simple y llanamente comisionistas. Hombre si encima los metes en un consejo, pues la cosa hasta parece más profunda. Pero no cuela.

¿O alguien se imagina que esos “consejeros” son una especie de visionarios contratados para resolver el futuro de una agencia? Obviamente, no. Ojo, que no estoy diciendo que sea un trabajo ilegal. En absoluto. Tan solo digo lo que digo, nada más. En el sector publicitario –como en el resto- si no tienes un “abre-puertas” estás muerto antes de empezar el combate. Porque por muy buena creatividad que presentes, etc, es imposible competir contra los fantasmas. Es como tirar puñetazos al aire. Una pérdida de tiempo.

Algunos manifiestan abiertamente que si en los concursos públicos no tienes un buen “contacto” lo mejor es que ni te presentes. De todo se ha visto. En 2009 se produjo el escandaloso caso de la adjudicación a TBWA de la cuenta de Dirección General de Tráfico (DGT). Tal fue el despropósito que el entonces Presidente del Club de Creativos (CdeC) Rafa Antón escribió una carta al director general de Tráfico de aquél momento (Pere Navarro) en la que dijo textualmente:

“(…) Lo verdaderamente escandaloso es la desproporción entre esos 42 puntos y los 3 ó 4 que obtuvimos de media la mayoría, ese muy deficiente colectivo con que su equipo ha tenido a bien despachar al conjunto de los creativos de este país. La lista de agencias de publicidad sobreras impresiona: SCPF, El Laboratorio, Tapsa, Contrapunto, McCann, Shackleton… Ni siquiera Publicis, la agencia que durante los dos últimos años le ha ayudado a presumir de cifras cada vez menores de mortalidad en carretera, se ha librado del patinazo pese a conocer las intimidades de su negociado mejor que ninguna otra. Un mal día lo tiene cualquiera. Que nos ocurra a todos a la vez ya es más difícil”.

La Administración supone más de la mitad de la inversión publicitaria en España. Como para no mosquearte.