Más de la mitad de los estadounidenses cree que las plataformas no deberían aceptar publicidad política
La recta final hacia las elecciones presidenciales de EEUU tiene como protagonistas cada vez más recurrentes a los gigantes de internet, especialmente por sus capacidades publicitarias. Pew ha preguntado en su última encuesta por ello y ha ha obtenido como resultado que un 54% de los estadounidenses considera que estas empresas no deberían permitir ningún tipo de anuncio político. De hecho, un 77% de los encuestados cree que no es aceptable el uso de datos personales para ser impactado por estas campañas de manera segmentada.
Como pasa a menudo en EEUU, los resultados difieren una vez se profundiza en la filiación ideológica de los participantes en la encuesta, aunque se mantiene la mayoría a favor de la prohibición total. Un 38% de los republicanos está a favor de que las plataformas acepten cualquier anuncio político, pero ese porcentaje desciende hasta el 15% en el caso de los demócratas.
La edad es otro factor clave en la posición sobre este asunto, ya que son los mayores de 65 años los más favorables a que no exista publicidad política de ningún tipo (64%), mientras que los jóvenes entre 18 y 29 años registran el menor apoyo a esa idea (45%). Estos últimos sin embargo tampoco son especialmente partidarios de que se acepte cualquier anuncio, y un 30% cree que solo deberían entrar algunos. Quienes están entre 50 y 64 años ofrecen su apoyo más pronunciado a la planificación libre de esas campañas (30%).
En todo caso, donde sí hay un consenso más evidente es en la negativa que expresan los encuestados sobre el uso de sus datos para que se les ofrezca esa clase de publicidad. Hasta un 77% piensa que no es aceptable en algún grado el uso de su información con ese fin, y esa opinión va en aumento a medida que avanza la edad de los participantes, desde el 71% de los jóvenes entre 18 y 29 años hasta el 87% de los mayores de 65. Republicanos y demócratas están prácticamente en los mismos números en este caso.
Este estudio, realizado entre el 8 y el 13 de septiembre, pone de manifiesto la preocupación por el rol que jueguen estos actores en unas elecciones muy disputadas y condicionadas además por el coronavirus. Magna Global estima que este año habrá un recórd de inversión en campañas políticas superior a los 5.000 millones de dólares y tanto Google como Facebook han ido tomando medidas para evitar convertirse en protagonistas indeseados de la campaña o de la jornada electoral.
