BBC tendrá que hacer ajustes para ahorrar 125 M tras la caída de ingresos por el coronavirus y el canon

| 22 MAYO 2020 | ACTUALIZADO: 25 MAYO 2020 9:10

La radiotelevisión pública británica acaba de publicar su plan anual 2020/21 y muestra en él una versión maximizada de la paradoja que viene afectando a todos los medios a lo largo de la crisis del COVID-19: por un lado, cifras históricas de consumo de sus contenidos en distintas plataformas y soportes; por el otro, una caída severa de ingresos que en parte es achacable a la debacle publicitaria y el parón de producción televisiva, pero que también recoge el impacto de no haber aplicado el pago del canon de acceso a los mayores de 75 años. Esto último, precisamente para que los más vulnerables a la enfermedad no afrontaran el riesgo de quedar desinformados.

En total, el cálculo de los gastos suplementarios y el lucro cesante alcanza 125 millones de libras, que se tienen que sumar a los ajustes que ya estaban previstos hasta 2022. Antes de que el coronavirus apareciera, la corporación ya se había comprometido a ahorrar hasta 800 millones y en principio la idea era completarlo con un año de adelanto, precisamente en este plan. Ese esquema de ajustes incluía prescindir de hasta 450 trabajadores en 2020 que finalmente continuaron en sus puestos para poder afrontar la sobrecarga de trabajo que ha implicado informar a una audiencia creciente sobre el coronavirus y sus consecuencias.

En esta situación la radiotelevisión pública británica ha descubierto una oportunidad para simplificar su operativa y afrontar esa reducción de costes, según indica en el documento: “La pandemia y nuestra respuesta de emergencia como emisora han cambiado radicalmente la manera de trabajar de BBC y han demostrado que la organización puede operar de una forma distinta”. Eso incluye medidas de capacitación para trabajar desde casa o de aprovechamiento de conocimientos y talentos de la plantilla para bascular necesidades internas.

Eso ha permitido atender a una demanda informativa que se ha sustanciado en récords variados que el organismo detalla en su plan. Desde el aumento de un 320% del consumo de sus vídeos en YouTube hasta un 360% más de interacciones en Twitter, pasando por hitos históricos de consumo televisivo inéditos en la era de internet. De hecho, nueve de cada 10 adultos consumieron contenido de BBC en Reino Unido en la primera semana de distanciamiento social en marzo y casi el 79% de los adultos británicos vieron en esas fechas los informativos de la televisión en línea.