CTXT obtiene beneficios en su tercer año: «buscamos lectores, no pinchazos»

| 11 ENERO 2018 | ACTUALIZADO: 12 ENERO 2018 9:38

El semanario digital CTXT inició su actividad en enero de 2015, impulsado por 14 periodistas sin apoyo empresarial o bancario y capitaneado por Miguel Mora. Comenzó a publicar a un ritmo pausado, bajo el lema de «orgullosos de llegar tarde a las últimas noticias». Después de tres años en la autopista de Internet, puede considerarse un medio económicamente sostenible.

Revista Contexto S.L., la sociedad editora de CTXT, cerró el 2017, su tercer año de actividad, con 1.977 euros de beneficio. En efecto, la cantidad vale más por su simbolismo que por sus posibilidades de ser reinvertida. Pero también representa un nuevo caso de éxito en la prensa digital de suscripción. Al fin y al cabo el negocio de la revista se basa en este modelo desde octubre de 2016.

«Sabíamos que estábamos muy cerca del equilibrio contable hace seis meses, y ese era nuestro plan para este año», explica Miguel Mora a este medio sobre las circunstancias que han permitido dar la vuelta a las cuentas en un periodo tan corto.

«El presupuesto anual -prosigue- era de 397.000 euros, y el aumento exponencial de las suscripciones en diciembre, a medida que nos acercábamos al objetivo de los 5.000, nos ha permitido acabar con unos modestos números negros». Antes de cuadrar sus cuentas, la editora había perdido 84.336 euros en 2015 y 38.632 en 2016.

De los 375.898 euros que facturó el medio el año pasado, los socios aportaron el 53% de los ingresos, más de 211.000 euros

Remarca que se trata de un pequeño hito que confirma que los modelos de prensa basado en las suscripciones pueden ser viables. «Ahora sabemos también que el modelo de negocio que lanzamos hace año y medio nos permite ser sostenibles y seguir creciendo», profundiza el periodista.

Como muestra de ello, de los 375.898 euros que facturó el medio el año pasado, los socios aportaron el 53% de los ingresos, más de 211.000 euros, mientras que la publicidad supone el 12,9%, 51.412 euros. Dentro de este apartado, Bankia volvió a ser, por segundo año consecutivo, la entidad que más fondos aportó (19,5%), seguido de la CAM (14,3%) y del Ayuntamiento de Barcelona (12,9%).

Procedencia de los ingresos.

 

Resulta llamativo el escaso peso que tiene la publicidad en la facturación total, que es además la mitad del año pasado. El ideario de CTXT es muy claro en este punto: solo acepta patrocinadores y anunciantes transparentes que no interfieran en la línea editorial. «Tenemos vetado el contenido patrocinado de índole comercial y, por supuesto, preferimos cerrar antes que aceptar publicidad oculta», asegura el medio en su último informe de cuentas.

Esto es así porque, según considera Mora, «el sector publicitario digital es una jungla muy opaca donde casi todo es mentira, y no solo por la polarización política sino porque se basa en unos hábitos putrefactos, que son el principal enemigo del periodismo».

Sostiene además que el escenario, dominado por Facebook Google, premia el click, «la compra ilegítima de robots-lectores, la publicidad oculta, los descuentos absurdos del 99%, y los acuerdos opacos bajo amenaza o compra venta de favores». Frente a este modelo, en el que las cifras de audiencia no se corresponden con la realidad, el periodista defiende la búsqueda de lectores y no pinchazos.

«La audiencia es una preocupación muy menor para nosotros. En tres años no hemos gastado ni 100 euros en Facebook. Cero euros en robots. Cero euros en Comscore. Esa no es nuestra guerra. El único objetivo es que esas 40 piezas sean cada vez mejores y poder pagarlas cada vez mejor», asevera. En este sentido, el 80% del presupuesto anual del medio se destina a retribuir el trabajo de los periodistas y colaboradores, donde se mantiene una proporción de dos veces y media entre el sueldo del director y de un redactor a media jornada.

Distribución de los gastos.

Renovación del acuerdo con Público

Si bien el cierre de año en positivo se explica principalmente por el aumento en el número de suscriptores, desde CTXT reconocen que también ha tenido gran influencia la alianza editorial sellada con Público a mediados de 2016. Este acuerdo, que implicaba el cruce de tráfico y de contenidos al diario que dirige Ana Pardo de Vera a cambio de una explotación del espacio publicitario del medio, fue renovado el pasado mes de octubre por un año más.

Por otro lado, descartan la idea de integrar una tercera publicación en esta alianza. Por cierto que, en relación a la concentración y fusión entre medios, Mora señala que «suelen producirse cuando uno de los dos está cerca del final. El sistema publicitario da de sí lo que da de sí, y es evidente que hay demasiadas cabeceras haciendo lo mismo y compitiendo por las mismas audiencias y usuarios –no lectores. Supongo que iremos viendo nuevas fusiones, y desapariciones de medios, sobre todo en el espectro de la prensa concertada afín a la derecha».

Por último, ante la forma dramática en la que ha comenzado el año editorial con el anuncio del cierre de Tiempo e Interviú, el responsable de CTXT sostiene que es natural que aquellas publicaciones que no han sido capaces de adaptarse al mundo digital vayan extinguiéndose poco a poco.

No en vano, destaca el que tras una crisis brutal que ha dejado a la prensa en el chasis, algunos medios empiecen a valorar la opción de cobrar por sus contenidos. Lo hace, eso sí, no sin crítica: «ahora el lobby de los editores ha descubierto que la forma de seguir adelante es que los lectores paguen por la información. Les felicito por ello, y les deseo mucha suerte en el empeño. Ojalá lo consigan, porque todavía, pese a la sangría acometida estos años, son ellos quienes pagan a la mayoría de los periodistas en activo. Pero, la verdad, lo veo crudo».