The Guardian

El grupo de The Guardian revela favores a agencias de publicidad

| 30 AGOSTO 2016 | ACTUALIZADO: 30 AGOSTO 2016 10:05

Guardian Media Group, la compañía editorial propietaria del periódico británico The Guardian, se encuentra en el ojo del huracán tras revelarse que supuestamente pagó a diversas agencias de publicidad y medios a cambio de un gran volumen de compra.

La controversia se ha vuelto a situar en las cabeceras británicas. En este caso mira al diario The Guardian, que ha desatado la polémica al conocerse que en sus últimos resultados anuales – los referidos al año 2015 – se incluye un párrafo que destaca «descuentos de publicidad». En dicho apartado se detallan diversas rebajas a anunciantes, así como pagos en efectivo y espacios de publicidad obtenidos gratuitamente.

Asimismo, la compañía también especifica en sus cuentas las previsiones de reembolso que habría obtenido de estos acuerdos con agencias. No obstante, y pese a que el grupo no ha querido hacer más comunicaciones que las recogidas en el informe, el hecho se ha valorado como un intento de mejorar la transparencia del grupo.

Sea como fuere, la revelación es importante porque involucra a numerosas agencias de publicidad y de medios estadounidenses, que podría ver su reputación afectada notablemente, a la vista de que en el país norteamericano se considera una mala praxis.

Cabe recordar que el grupo de The Guardian no ha sido la única compañía que ha admitido públicamente estos negocios sospechosos.  El pasado año el Daily Mail compartió también cifras reales de este tipo de acuerdos como parte del informe anual de cuentas correspondiente al año 2015.

Controversia en la estrategia

La reciente información proporcionada por Guardian Media Group ha chocado con la apuesta por una publicidad de calidad promovida por el grupo a finales del año pasado. La cabecera garantizaba a las compañías publicitarias que únicamente cobraría por aquellos anuncios consumidos por personas físicas en navegadores y dispositivos móviles.

Pese al grave descenso de los ingresos publicitarios, este movimiento realizado por la compañía británica se consideró como una gran estrategia que, sin embargo, ha quedado de manifiesto en la actualidad.