La AMI intercede ante Boyacá para exigir el pago de la recaudación de periódicos
La Asociación de Medios de Información (AMI) se ha puesto en contacto con Boyacá, la empresa encargada de distribuir la mayoría de periódicos en España, para intentar reconducir la situación de conflicto surgida con los editores por impago de la recaudación de ejemplares.
Tal y como desveló este medio, la empresa distribuidora resolvió suspender de forma unilateral el abono de los ingresos obtenidos en marzo con la venta de periódicos y el reparto de suscripciones. Previamente también había reducido la mitad la cuantía de los pagos correspondientes a enero y febrero. Ante la incapacidad de respuesta para reclamar la liquidación de estas facturas, la patronal de la prensa ha decidido mediar en favor de sus asociados.
En una carta dirigida a la dirección general de Boyacá, la AMI reconoce la disconformidad de los editores que representa, «a los que no se ha ofrecido explicación alguna sobre los motivos que han llevado a este pago parcial de las facturas». Según señalan fuentes del sector, la distribuidora de diarios como El País, El Mundo o ABC no ha justificado las razones de su decisión ni ha establecido un periodo de duración para la medida.
En estas circunstancias, todas las empresas afectadas se declaran cautivas de una medida que ha castigado duramente sus cuentas trimestrales. Asimismo, fuentes del sector admiten que la situación puede lastrar la actividad de los próximos meses.
«Una decisión de este calado debería haber estado precedida de una explicación», expone la patronal, que también lamenta la ausencia «de un pacto con sus clientes en relación con el retraso en los pagos, así como de un calendario en el cual se determinaran las fechas en las que se van a hacer efectivos los importes pendientes».
Así, lejos de dar por perdida la recaudación, cuya cantidad varía en función de la venta al número y suscripciones de cada periódico, la patronal insta a los responsables de Boyacá a que expliquen «el modo en el que tienen previsto dar cumplimiento a sus obligaciones de pago de los importes pendientes».
Aunque la mayoría de editores afectados ve improbable recuperar los ingresos retenidos, algunos confían en que la presión ejercida desde la AMI resulte determinante para alcanzar una solución favorable a sus interés. Más aún en un momento tan delicado como el actual, con la publicidad y venta de ejemplares fuertemente asoladas por los efectos económicos del coronavirus.
No obstante, los informantes consultados advierten que las negociaciones se deben plantear con mucha delicadeza, toda vez que la empresa tiene el monopolio del sector desde 2013. Es responsable de hacer llegar un total de 91 cabeceras a los puntos de venta en la mayoría de las comunidades autónomas, incluida Madrid. Sólo Cataluña (Godó), País Vasco (Vocento) y Aragón (Henneo) quedan fuera de su zona control.
