Mediaset relaciona la fuga de anunciantes con una «campaña de desprestigio» de Atresmedia
Mediaset España y Zeppelin TV han roto su silencio para pronunciarse sobre la polémica en torno al presunto abuso sexual sucedido en la edición de GH Revolution 2017. Lo ha hecho después de que quince marcas hayan decidido retirar su publicidad del formato estrella de Telecinco en menos de 72 horas.
En su comunicado el grupo audiovisual acusa directamente a Atresmedia, su gran competidor, de estar detrás una «campaña denigratoria» contra Gran Hermano, y por tanto de la fuga de anunciantes como Nestlé, Mediamark, Nescafé, Tous, Nissan España o Telepizza, entre otros.
«Las acciones de desprestigio están siendo avivadas de manera desleal desde los espacios y programas informativos de Antena 3, LaSexta, Onda Cero y algunos de sus portales verticales, a los que también se suma el diario La Razón, con el que comparte accionista el grupo editor», sostiene el comunicado hecho público por Mediaset la tarde del miércoles 27 de noviembre.
La compañía se compromete «a trabajar responsablemente para superar esta situación a la mayor brevedad posible, protegiendo uno de los programas preferidos por la audiencia española». Un mensaje que coincide con el contenido de la carta que ha dirigido a los anunciantes ese mismo día para «dejar patente su decidido e invariable rechazo de todo tipo de abuso».
«Desde nuestro firme y demostrado compromiso en contra de todo tipo de abusos, es preciso recordar que el caso se encuentra en manos de la Justicia, en un proceso del que Mediaset España no forma parte ni ha sido llamada a declarar», concluye el comunicado.
El goteo de salidas comenzó a raíz de que El Confidencial hiciera público el vídeo en el que la organización del programa mostraba a Carlota Prado el presunto abuso sexual que sufrió por parte de otro concursante, José María López.
Sobre este documento, Zeppelin TV, la productora del programa, ha anunciado que «revisará todos sus protocolos y reforzar los equipos para afrontar eventuales situaciones de vulneración de derechos«. Un comunicado en el que reconoce que «fue un error la primera comunicación» a Carlota.