RTVE empeora su pronóstico y estima cerrar el año con unas pérdidas de 50 millones

La situación económica de Radio Televisión Española (RTVE) empeora respecto a su anterior pronóstico. Si a finales de abril la corporación anticipaba perder entre 20 y 30 millones de euros para este 2020 como consecuencia del virus, la última previsión dibuja un escenario más acusado tras contar con datos más precisos del impacto provocado en sus cuentas.

Según ha explicado la administradora provisional única de RTVE, Rosa María Mateo, la estimación es cerrar el año con un déficit de alrededor de 50 millones de euros. Este resultado negativo dobla las previsiones efectuadas hace cuatro meses y que ya obligaba a revisar el plan presupuestario por medio de ajustes en los gastos en distintas partidas de la televisión y radio públicas.

Los efectos de la crisis han repercutido tanto los ingresos comerciales directos como a través de las aportaciones de los operadores a la financiación de RTVE. Esta última corrección se atribuye a la caída de la inversión publicitaria sufrida a raíz de la pandemia. A esta situación hay que añadir un mayor gasto derivado de necesidades coyunturales, como equipamientos de protección individual y la realización de test al personal, o de incidencias como la suspensión de producciones audiovisuales.

“No voy a entrar en comparaciones con otros ejercicios, pero sí a recordar que estos números rojos son muy inferiores a los 113 millones con que se cerraron 2012 y 2013 y a los 135 millones con que se cerró 2014”, ha remarcado Mateo este jueves en la presentación de las cuentas de la corporación para 2021 ante la comisión de Presupuestos del Congreso de los Diputados.

El presupuesto para este ejercicio alcanza una cifra total de ingresos y gastos de 1.127 millones euros, un 12,7% más de lo dispuesto en 2018, “lo que permitirá cubrir los déficits ocasionados por las dos prórrogas y ampliar la oferta de contenidos de calidad, así como cumplir con los objetivos establecidos en nuestro Mandato Marco”, ha señalado la responsable de gestionar la corporación.

Respecto al impacto del coronavirus en sus cuentas, ha destacado que “es de vital importancia, resolver las carencias del actual modelo de financiación”, al tiempo que ha insistido en mejorar la recaudación de las aportaciones de los operadores de televisión y telecomunicaciones, para garantizar que se realicen conforme a lo establecido en la ley de financiación y que se adecuen a la situación actual incluyendo a las nuevas plataformas en el sistema de financiación. “Una situación en la que desempeña un papel muy importante la irrupción de las plataformas en el panorama audiovisual que deberían contribuir a financiar la radio televisión pública”.

También ha reclamado que debe establecerse un sistema mediante el cual todo el IVA sea deducible para estar en igualdad de condiciones con las televisiones privadas. En esta línea ha recordado que los presupuestos prorrogados de 2018 no permitieron cubrir en 2020 dos incrementos de gastos sobrevenidos y ajenos a la gestión de la Corporación, como fueron el cambio normativo en el tratamiento del IVA y las revisiones salariales de los ejercicios 2018, 2019 y 2020.

El 95% de los ingresos de la Corporación, 1.065 millones de euros, son subvenciones públicas “y por lo tanto dependen de factores externos que no podemos controlar”, ha remarcado. En concreto, 473 millones corresponden a la compensación por servicio público; 410 millones corresponden a la tasa sobre reserva del dominio público del espacio radioeléctrico y 180 millones a aportaciones de los operadores de telecomunicaciones y de televisión, un 18,8% menos respecto a 2018 por los efectos del Covid y la caída de la inversión publicitaria.