Genís RocaGenís Roca.

Genís Roca: «Inteligencia artificial es un nombre pésimo, solo se trata de una nueva generación de software»

| 6 JUNIO 2025 | ACTUALIZADO: 9 JUNIO 2025 10:02

“Estamos leyendo lo de la inteligencia artificial faltos de perspectiva. Llevamos dos o tres años hiperventilando con esto y hay que recuperar esa perspectiva. No es algo nuevo”.

Esta fue una de las ideas con las que Genís Roca, el reconocido experto e innovación y transformación digital, dio comienzo a la conferencia que pronunció dentro del programa del festival El Sol, organizado por la Asociación de Creatividad Transformadora (ACT) en Málaga los pasados días 29 y 30 de mayo. Los ingredientes de relativización, humor y desdramatización que contienen esas frases iniciales ya estaban implícitos en el título de su charla: “¿alegrIA, tonterIA o agonIA?”.

La primera idea que trasladó Roca a la audiencia es que, pese a las apariencias y a lo que se afirma comúnmente, el proceso que nos ha traído hasta aquí “no ha sido vertiginoso”, sino que se ha prolongado a lo largo de cuarenta años. Trazó una línea temporal que se inicia en los años 80 del siglo pasado con los grandes ordenadores, pasa por los 90, que son la época de los PCs; sigue con la progresiva generalización de internet con el cambio de siglo, la llegada del smartphone en la década de los 10 y lo que podría llamarse la generalización de los dispositivos conectados y generadores de datos en el momento actual.

“Internet es un flujo constante de información en soporte digital”, señaló Roca, “que nació como un caudal corporativo, siguió con la llegada de las personas y así se convirtió en fuente de información y opinión, y actualmente se configura como una fuente de datos generados por sensores en tiempo real y de forma constante, y esta última realidad, subrayó sí es nueva.
Las fuentes básicas de negocio que ha propiciado internet también han cambiado con el tiempo, como señaló el ponente. En los primeros tiempos los ingresos llegaban de la conexión; en una segunda etapa, han procedido de la publicidad, y aquí los grandes protagonistas han sido Google y Meta y su modelo de servicios gratuitos financiados con anuncios; y actualmente estamos en una tercera fase, en el que el modelo de negocio se basa en la suscripción».

Ahora hace falta

“Hoy internet es servicio en tiempo real, personalizado y por suscripción”, dijo Roca. “Para hacer todo esto se necesita la inteligencia artificial y por eso se ha acudido a ella ahora, porque hace falta”. Para rematar su argumento, dijo que estamos en la época de los servicios personalizados masivos en tiempo real y basados en datos y subrayó dos cuestiones en relación esto: una, que las empresas han de tratar de cumplir todas las condiciones del aserto; y dos, que por primera vez en la historia se pueden hacer realidad a la vez dos conceptos aparentemente opuestos: personalizado y masivo. “Las expectativas de las personas por este tipo de servicios va a air a más”, dijo.

Roca afirmó también que la pretensión de las grandes tecnológicas estadounidenses de dominar el mercado de la inteligencia artificial, que ellas presentaban como inevitable, se reveló como fallida tras la presentación de los modelos de IA de la empresa china Deepseek. “No está mal, me da esperanza”, dijo el ponente en relación con el hecho de que el conocimiento y el negocio de la inteligencia artificial no se concentre en pocas manos y en un solo país, y añadió: “La IA no será monopolio de nadie, pero es un tema muy serio, la usan los ejércitos. Tú te das cuenta de que una tecnología es algo serio cuando la usan los de la guerra”.

“La inteligencia artificial es el Red Bull del software”.

Tras estas reflexiones, planteó a modo de recapitulación dos preguntas. Una fue qué es la inteligencia artificial y su gráfica respuesta fue que se trata de “el red Bull del software”. Supone un cambio de tal calibre que, según advirtió, “va a haber que sustituir todo el software de las empresas, y eso no es fácil: cuesta mucho y no se puede hacer todo a la vez”. La IA permitirá, asimismo, incorporar software en áreas donde no lo había.

Roca comentó también que “la IA es estadística al máximo nivel” y que la estadística necesita datos, pero que los mejores son los datos propios de las empresas y “no los que están en ChatGPT”.

Exploración y artesanía

La segunda pregunta fue qué hacer frente a todo este fenómeno. “La IA está en una fase inicial, de exploración y artesanía, en la que va incorporando nuevo software y buscando nuevas formas de trabajar”. Las empresas deben sumarse a la corriente, “pero no es un sprint”, advirtió Genís Roca. “Es una maratón, pero hay que empezar a correr ahora”. Las empresas han de incorporar la IA a sus procesos, a sus herramientas a su gobierno corporativo y a su estrategia. Y como para alimentarla necesitan datos de las personas, han de esforzarse en generar confianza en las mismas.

Roca terminó con un consejo léxico y, de nuevo, desdramatizador en relación con la IA, y es evitar el empleo del término tecnología cuando se alude a ella: “El uso de la palabra tecnología delata que estás incorporando algo pero que aún no lo has hecho; [en el caso de la IA] es mejor hablar de nuevo software y ver cómo incorporarlo al negocio”.