La CNMC investiga a Apple por posibles prácticas anticompetencia en su tienda de aplicaciones
Apple está oficialmente en el punto de mira de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que le abre investigación para aclarar si se impone condiciones comerciales desiguales a los desarrolladores en su tienda de aplicaciones.
El regulador ve un posible abuso de posición de dominio que prohíben tanto la Ley de Defensa de la Competencia (artículo 2) como el Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (artículo 102).
La CNMC no ofrece demasiados detalles sobre las conductas que quiere evaluar. Pero si encontrara al gigante tecnológico culpable de violar la normativa que vela por la competencia, podría imponerle multas de hasta el 10% de sus ingresos anuales en el ejercicio previo. El plazo máximo para que se desarrolle el proceso es de 24 meses.
La App Store de Apple ya viene siendo objeto de investigación por parte de la Comisión Europea, que en junio publicó conclusiones preliminares con prácticas ilegales que intentarían evitar que por ejemplo los usuarios sepan de la existencia de otros servicios de pago.
Eso es clave en la medida en que el gigante tecnológico cobra el 30% el primer año y el 15% a partir del segundo sobre cada cobro realizado en una aplicación para iOS.
Y de hecho hay un segundo proceso en marcha centrado en analizar la nueva comisión fijada por la compañía como respuesta a la DMA, denominada «Core Technology Fee» (CTF).
Apple ofrece ese nuevo esquema como alternativa al tradicional y su aceptación implica el pago de 0,5 euros por cada instalación conseguida después de un millón de descargas si es comercial y/o de pago.
Las eventuales condiciones desiguales que la compañía impone a los desarrolladores están en tela de juicio.
Además el gigante tecnológico fue multado por la Comisión Europea en marzo con 1.840 millones de euros por prácticas anticompetitivas relacionadas con aplicaciones de streaming musical. Y a principios de julio llegó a un acuerdo para evitar otra sanción al aceptar el uso de las capacidades de pago sin contacto de sus dispositivos por parte de competidores.
Esa presión de autoridades y reguladores europeos está detrás de la decisión de Apple de aplazar el lanzamiento de funcionalidades de inteligencia artificial en Europa hasta 2025. El objetivo es garantizar que cumplen con el marco legal comunitario y evitar nuevos procesos en contra.
