División de opiniones entre los directivos publicitarios ante la victoria de Donald Trump
Tras asumir la victoria de Donald Trump, las empresas todavía disponen de algo más de un mes para conjeturar acerca de cómo les afectará las políticas que decida articular el nuevo presidente de los Estados Unidos una vez tome posesión oficial del cargo, el próximo 1 de enero.
La incertidumbre que marcaron los días posteriores a las elecciones parece haber dado paso a la calma y el análisis. Es el caso del presidente ejecutivo de Omnicom Group, John Wren, quien no ha dudado en dar la bienvenida a Trump afirmando que su victoria ayudará a su compañía.
Durante una conferencia que dio en Barcelona la semana pasada, el presidente del holding estadounidense aseguró que los resultados electorales «van a beneficiar a compañías como Omnicom». Con este comentario se suma a quienes consideran que la elección de Trump será una buena noticia para el sector corporativo del país, toda vez que las compañías podrán beneficiarse de una regulación más laxa, como es la bajada de impuestos prometida.
Curiosamente, Wren en ese mismo encuentro reconoció que los ingresos de la publicidad del presente ejercicio están siendo menores a los esperado, sobre todo teniendo en cuenta que el impacto publicitario que se esperaba de las elecciones estadounidenses.
El optimismo del presidente de Omnicom choca frontalmente con la desilusión de otros de los grandes de la publicidad. Martin Sorrell, máximo dirigente de WPP, opinó nada más conocerse los resultados que la derrota de Hillary Clinton con un «segundo Brexit». Se trata de una reacción razonada, puesto que Trump se ha pronunciado contrario a la adquisición de Time Warner por parte de AT&T al considerar que significaría «demasiada concentración de poder en las manos de muy pocos».
Del mismo modo, el CEO de WPP ha señalado también que “claramente la clase media se ha expresado, tanto en Estados Unidos, como en Europa Occidental, y los retos de la inmigración, el terrorismo y el comercio son temas claves que han impactado en el electorado».
Otro de los popes publicitarios mundiales es Maurice Levy, presidente del grupo francés Publicis. Si bien este directivo opinó al día siguiente de la victoria de Trump el futuro del sector se volvía «incierto»; una vez pasados los días ahora cree que tras «la sorpresa inicial», la elección del magnate ha sido «bastante tranquilizadora».
También en la conferencia de Barcelona, Levy comentó acerca de Trump que «todo el mundo sabe que es un pragmático … no es un ideólogo en absoluto».
