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La televisión de pago bate a Atresmedia y Mediaset en facturación anual

| 4 MAYO 2018 | ACTUALIZADO: 7 MAYO 2018 8:53

El año pasado fue el mejor de la historia para la televisión de pago, ya de forma oficial. Amplió su base de abonados de 6 a 6,5 millones y, más importante aún, disparó su facturación hasta los 2.133,95 millones de euros, según las últimas cifras aportadas por la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia (CNMC).

Estos dos hitos ponen en órbita a este negocio televisivo tras el fulgurante ascenso registrado en el número de abonados, 500.000 más que hace un año y 2,8 millones más desde 2013, cuando tocó fondo. Una tendencia al alza que, a juzgar por los resultados trimestrales reportados por las operadoras, se mantuvo en el primer trimestre de este año.

No en vano, el volumen de ingresos registrado en 2017 es fruto tanto del aumento en las contrataciones de plataformas de pago como de su fortaleza comercial. En cualquier caso, esta cifra ha permitido que Movistar, Orange y Vodafone superen a la televisión en abierto por primera vez.

Los datos de la CNMC reflejan que los ingresos de las operadoras de pago se situaron por encima del abierto, que llegaron a los 1.913,43 millones de euros. Así pues, lo hicieron por un margen de más de 200 millones, por lo que el negocio de las primeras creció un 12,3% durante el año pasado, mientras que el de las segundas apenas lo hizo un 2%. De esta forma, el volumen declarado por Atresmedia y Mediaset en sus informes anuales, 1.052 y 996,3 millones de euros respectivamente, fue inferior al obtenido por el pago.

Despunte en la segunda mitad del año

Tanto la cifra de facturación histórica como el sorpasso a los grupos audiovisuales que operan en el abierto ponen el broche a un ejercicio marcado por la velocidad de crucero del pago y la entrada en barrena del abierto. A mitad de año la diferencia de facturación entre el pago y el abierto era de 65 millones de euros, a favor del primero, para después ampliarse hasta los 216 millones en septiembre.

A partir de ahí la horquilla más o menos se mantuvo tras un cuarto trimestre francamente bueno para el sector audiovisual. Según los datos de Competencia, los grupos del abierto, entre los que se cuentan Atresmedia y Mediaset, facturaron 560 millones de euros entre los meses de octubre y diciembre, frente a los 564 de Movistar, Orange o Vodafone.

La mejora en el mercado del pago llegó a todos los operadores, pero especialmente a Movistar, que acaparó el 75% de la facturación total con 1.602,04 millones de euros. Esto es, un 9% más que en 2016. Por su parte, Vodafone ingresó 221,26 millones de euros, lo que representa una mejora del 24% respecto al año anterior; mientras que Orange alcanzó los 85,64 millones de euros.