La transparencia, el antídoto contra los juicios paralelos: «Hay que sentarse con los periodistas y contar tu versión»

| 18 ENERO 2022 | ACTUALIZADO: 19 ENERO 2022 8:17

La lucha por la exclusiva, la presión mediática y sus distintos enfoques o la escasez de transparencia son algunos de los motivos por los que decenas de procedimientos judiciales de interés para la opinión pública han visto alterados sus tiempos y desenlaces en numerosas ocasiones. Sin embargo, pasan los años y los casos y sigue sin encontrarse la fórmula perfecta de tratamiento ni el equilibrio ideal entre lo que se debe, lo que se puede y lo que finalmente se hace en estas delicadas situaciones.  

Con el objetivo de plantear la problemática y encontrar posibles soluciones a estos juicios paralelos, la consultora Proa Comunicación ha organizado el observatorio ‘La pena de telediario’, donde cuatro expertos de diferentes ámbitos han expuesto su punto de vista.  

A pesar de que durante la jornada se han tratado diferentes puntos que resultan clave a la hora de esclarecer la encrucijada, hay un término que ha ocupado un papel protagonista en la mayor parte de las reflexiones: la transparencia. 

La transparencia como antídoto a los juicios paralelos

Este concepto, según la responsable de Tribunales del diario El Mundo, Ángela Martialay, supondría el “mejor antídoto” ante los juicios paralelos. En su introducción, la periodista argumentaba que, a pesar de que es común, el silencio en este tipo de situaciones es “la peor estrategia” y podría llegar a ser para todas las partes implicada casi tan dañino como la mentira. 

En la misma línea, el fiscal de Sala del Tribunal Supremo (TS) Javier Zaragoza -quien ejerció la acusación en el juicio del ‘procés’- quiso recordar que en la vista contra los líderes independentistas de 2019 el hecho de «retransmitir en directo el juicio” consiguió mitigar en las calles “cualquier juicio paralelo». Para Zaragoza, además de tratarse de “un derecho” de la sociedad, la transparencia «es una garantía y ayuda a que la sociedad tenga confianza en esa administración de justicia».  

«Retransmitir en directo el juicio del ‘procés’ neutralizó cualquier juicio paralelo».

Desde el punto de vista de Luis Jordana de Pozas, responsable del departamento de Derecho Penal de Cuatrecasas, tanto los abogados como los clientes “tienen que aprender que hay que hablar con la prensa”. “No podemos enclaustrarnos pensando en no salir, porque acabas saliendo más y peor. Hay que sentarse con los periodistas y contar tu versión”, afirmaba. 

Esta conclusión también ha sido respaldada por Martialay opinando que los imputados deberían “buscar una agencia o hablar directamente con la prensa para dar su versión, porque si no, la dará otro». Asimismo, ha aclarado que «los medios de comunicación no vamos a dejar de hablar porque alguien no quiera que se hable de ello». 

En cualquier caso, la periodista también ha llamado la atención a los medios recordando que su responsabilidad a la hora de “dar una información veraz y de hacer un seguimiento a lo largo del tiempo” de los casos. “Muchas veces cuando empieza un juicio abre portadas pero luego la resolución queda en breve”. 

“Hay un gran porcentaje del juicio paralelo que es inevitable”.

Por su parte, el magistrado del Tribunal Supremo Antonio del Moral se ha mostrado algo más negativo en lo que a la búsqueda de soluciones se refiere. Y es que, según apuntaba, no se trata de un problema del siglo XXI, sino de una tendencia que lleva décadas formando parte de los procedimientos judiciales. “Hay un gran porcentaje del juicio paralelo que es inevitable”, ha aclarado en referencia a que “el proceso judicial mismo es ya un castigo” y que dicha pena solo será reparada, “para los creyentes, en el juicio final”.  

Los imputados deberían «buscar una agencia o hablar directamente con la prensa para dar su versión».

Otro de los factores en el que los ponentes se han mostrado de acuerdo es en la exagerada duración de muchos de estos casos. Según los profesionales, que un juicio se alargue durante años solo favorece la aparición de los juicios paralelos. 

Además, los trabajadores de la justicia comentaban que en muchas ocasiones cuando el proceso finaliza y el acusado resulta inocente el daño mediático, social y personal ya está hecho y es imborrable para la mayoría. Sobre esto, Del Moral apuntaba que, a pesar de que “la libertad de información deja víctimas inocentes (…) tiene tantos beneficios que no podemos renunciar a ella”.