Decenas de asesores de comunicación buscan destino profesional con el nuevo Gobierno
La vida política de España ha cambiado radicalmente en cuestión de días. La llegada de Pedro Sánchez a la Moncloa ha provocado un movimiento telúrico en la administración del Estado, en el que los nombres del nuevo gabinete no son más que la punta del iceberg.
Según cálculos de Gestha, entre 437 altos cargos y 6.000 funcionarios eventuales y de carrera en puestos de confianza cesarán en las próximas semanas como consecuencia de la alternancia en el Gobierno. Un baile de millares de puestos de confianza que será aún más agudo por la velocidad del cambio.
Dentro de las personas que podrían cambiar de silla o abandonar su puesto a lo largo de este mes se cuentan decenas de profesionales de la comunicación. La llegada de un nuevo equipo de ministros ya se ha hecho notar en la línea de cargos relacionados con directores, técnicos, asesores de comunicación, que empiezan a enfilar la puerta de salida en busca de nuevas oportunidades profesionales. También en aquellas empresas con participación pública.
Una de las profesionales a la que menos podría costarle reubicarse es María González Pico. La hasta ahora directora de gabinete de Vicepresidencia, una de las más influyentes en la política española, podría recalar en el Grupo Popular del Congreso.
Juan José Esteban es otro de los profesionales que se plantea emprender un camino de vuelta. El director de la Oficina de Comunicación y Relaciones Institucionales del Ministerio del Interior podría volver a la Policía, a la que llegó en 1996 como responsable del Gabinete de Prensa.
Martínez Castro, en excedencia
Pese a lo que pueda parecer, el horizonte profesional del resto de asesores no parece tan claro. Por ejemplo, se desconoce el destino de casi todos los directores de comunicación ministeriales o, sin ir más lejos, el de Carmen Martínez Castro. La hasta ahora Secretaria de Estado de la Comunicación, sustituida por el también periodista Miguel Ángel Oliver, podría volver a Onda Cero, donde mantiene un permiso de excedencia desde 2011.
No en vano, lo cierto es que si bien la mayoría tiene asumido que la entrada del Gobierno de Sánchez implica abandonar sus ocupaciones actuales, solo una pequeña parte logrará ser recolocada en otras administraciones donde gobierna el Partido Popular.
La posibilidad de reubicar a los profesionales salientes en otros organismos es incluso una opción remota, teniendo en cuenta las pérdidas municipales y autonómicas que han registrado los populares en los últimos tiempos. Además, hay que tener en cuenta que los departamentos de comunicación ya están formados, lo que obligaría a ampliarlos para abrir hueco.
La otra vía a explorar son las empresas o medios privados, como la cadena COPE. Pero tampoco aquí abundan las oportunidades para los periodistas o comunicadores, que podrían llegar a ser un torrente una vez se consume la renovación en RTVE.