
Getty Images y Shutterstock acuerdan una fusión que creará un gigante del contenido visual
Dos de los principales actores de la industria de la fotografía editorial serán los primeros en poner a prueba la nueva perspectiva regulatoria que trae Donald Trump en EEUU sobre grandes operaciones de concentración empresarial. Getty Images y Shutterstock han acordado una «fusión entre iguales» que creará un gigante valorado en unos 3.700 millones de dólares.
Ambas partes han confirmado la noticia avanzada previamente por Bloomberg, y han hecho públicos los términos de un acuerdo por el que Getty Images pagará 331 millones de dólares en efectivo y 319,4 millones en acciones de la compañía. Eso supone que los propietarios actuales de la compañía pasarán a tener cerca del 55% del conglomerado resultante, que recibirá el nombre de Getty Images Holding, mientras que los accionistas de Shutterstock controlarían el 45% restante.
Las dos empresas anticipan sinergias de costes que se situarían entre 150 y 200 millones de dólares anuales en los tres primeros ejercicios de la nueva compañía. Esa es una de las claves de la operación en la medida en que Getty Images acumula una deuda de 1.400 millones de dólares. En sus 29 años de existencia ha cambiado de manos varias veces, para retornar a bolsa en 2022 y registrar desde entonces una caída de más del 70% de su valor.
En todo ese tiempo ha acumulado un enorme catálogo de contenido visual realizado por profesionales y licenciado sobre todo a medios o agencias de publicidad. Su modelo de negocio es muy complementario con el de Shutterstock, que nació como una plataforma en la que terceros pueden subir contenido y recibir dinero por las descargas que genere. Venía cotizando en bolsa desde 2012 y arrastra una caída de en torno al 50% en los últimos años.
Otro de los condicionantes que impulsa la operación es el impacto de la inteligencia artificial generativa en el negocio de ambas compañías. Aunque en 2023 las dos presentaron sendas funcionalidades para habilitar la creación de contenidos visuales en base a sus inventarios, su principal fuente de ingresos está en riesgo por la incidencia de nuevos rivales como Sora, Midjourney o Stable Diffusion.
Ahora queda por ver si los reguladores de EEUU no se oponen a un acuerdo de este calado bajo la presidencia de Trump, algo que sí ha sucedido a lo largo del mandato de Joe Biden en sectores como aerolíneas y supermercados. Lo esperado es que los candidatos designados por el presidente electo para liderar la Comisión Federal de Comercio (FTC) y el área antimonopolio del Departamento de Justicia, los dos organismos con funciones delegadas en la protección de la competencia, sean menos estrictos que sus antecesores.