El Gobierno destituye al hombre fuerte de la publicidad institucional de Cataluña en plena búsqueda de agencias
El Gobierno de España destituyó el viernes pasado -en virtud de la aplicación del artículo 155 de la Constitución- a Antoni Molons, alto cargo de la Generalitat de Cataluña que ocupaba el cargo de secretario de Difusión de la administración regional.
Desde ese puesto se encargaba de gestionar la publicidad institucional de la Generalitat de Cataluña. Precisamente, su destitución se produjo a las pocas horas de ser detenido por la Guardia Civil en el marco de la investigación de la financiación de la campaña del referéndum ilegal del 1-O.
Al parecer, Molons pudo ejecutar pagos opacos con los que la Generalitat pretendía -supuestamente- burlar la prohibición del Tribunal Constitucional de destinar partidas de los presupuestos a la organización del referéndum. Hay que recordar que las agencias de medios que forman parte del pool de la Generalitat ya rechazaron gestionar esta campaña -con la que supuestamente se pretendía potenciar los valores cívicos- porque sospechaban que realmente el interés de la administración regional era animar al voto en el referéndum ilegal.
La destitución de Molons llega en un momento crucial para la publicidad institucional de la Generalitat de Cataluña, pues actualmente se está tramitando el nuevo acuerdo marco publicitario que ha de sustituir al anterior. Este concurso estaba siendo pilotado hasta ahora por el propio Antoni Molons.
Hasta el momento, venían trabajando con la Generalitat desde 2015 Havas Media, Proximia Havas y Arena Media (del grupo Havas), Carat (Dentsu Aegis Network), Focus Media (WPP), Netthink y la UTE formada por Kardumen Grau Clotet y Nothingad.
Una vez cumplidos los tres años de vigencia de ese acuerdo marco publicitario, la Generalitat inició hace unos días el proceso de búsqueda de nuevas agencias de medios. Al ser una de las administraciones públicas que más fondos emplea en publicidad institucional, se presentan a este concurso las agencias de medios más relevantes entre las que operan en Cataluña.
Una cuenta de 43 millones en juego
No en vano, el valor del contrato asciende a 43 millones de euros, que es un 20% más que el anterior acuerdo marco. La mayoría de ese presupuesto (60%) estará destinado a los medios audiovisuales, mientras que el 30% se reserva para los medios impresos. Solo el 10% se prevé entregar a los medios digitales.
En principio, la destitución de Molons no va a alterar los plazos de este importante acuerdo. En aproximadamente un mes ya se podrán conocer las agencias de medios que han presentado las mejores propuestas y, como consecuencia, las adjudicatarias de este jugoso contrato.
Antoni Molons también tenía el poder de beneficiar a unos medios con la publicidad institucional y penalizar a otros, en función de los intereses de la Generalitat de Cataluña. Así, en 2016 el medio que más publicidad institucional recibió en la comunidad autónoma fue El Periódico, con 3,2 millones de euros; seguido de El Punt Avui (1,9 millones de euros), seguido de La Vanguardia (1,8 millones) y Ara (1 millón).
Presumiblemente, los datos correspondientes a 2017 cambiarán de forma destacada, pues la cabecera del grupo Zeta ha caído en desgracia por su posicionamiento contra el procés, ya que la Generalitat le ha cortado el grifo de las subvenciones y de la publicidad institucional. De ahí, la precaria situación que ha presentado la editora catalana a principios de este año, con el cierre de Interviú y Tiempo, y la presentación de un ERE en El Periódico de Cataluña.
