Justin Trudeau.

Canadá quiere obligar por ley a los gigantes tecnológicos a negociar el pago por contenidos con los medios

| 8 ABRIL 2022 | ACTUALIZADO: 11 ABRIL 2022 9:47

El Gobierno canadiense sigue los pasos del australiano y acaba de introducir nueva legislación con el objetivo de forzar a las grandes plataformas tecnológicas y otros “intermediarios” a compensar a los medios del país por el uso de sus contenidos. La denominada Online News Act está pendiente de aprobación parlamentaria y establece que si no hubiera acuerdo entre partes se iniciaría un proceso de arbitraje obligatorio gestionado por el regulador nacional de radiotelevisión y telecomunicaciones (CRTC). Ese organismo sería además el que determine qué actores de cada segmento serán afectados por la ley y en qué condiciones, a diferencia de lo que sucede en Australia.

Lo que ese marco legal no deja claro es qué medios están sujetos a él. El texto alude a “organizaciones cualificadas” según la clasificación de la legislación sobre impuestos (Income Tax Act) o bien proyectos con al menos dos periodistas que produzcan “contenido informativo enfocado primordialmente a asuntos de interés general” y no centrado en “un tema particular como noticias específicas de una industria, deportes, ocio, arte, estilo de vida o entretenimiento”. La redacción tampoco concreta si la radiotelevisión pública CBC podría quedar cubierta por esta ley.

El documento presentado abre la puerta a que los medios puedan negociar en conjunto con los gigantes tecnológicos a pesar de la normativa antimonopolio del país. La exención de este proceso de la vigilancia de la competencia en el sector también se da en una propuesta similar en EEUU y parte de la base de que los medios menos relevantes pueden obtener así un acuerdo más beneficioso.

El impacto de esta legislación se cifra en que empresas como Meta o Alphabet acabarían costeando en el conjunto de las negociaciones al menos el 30% de los costes de mantenimiento de las redacciones canadienses, según estimaciones previas. Eso significa en torno a 100 millones de dólares al año que tendrían que ser reinvertidos en gran parte en financiar la sostenibilidad del ecosistema informativo canadiense.

La inyección es muy relevante para un sector que ha perdido en torno a 450 medios y un tercio de los puestos de trabajo desde 2008, según cifras manejadas por el Gobierno de Justin Trudeau. Todo ello en el contexto de la pérdida de la gran fuente tradicional de ingresos que suponían los clasificados a manos de portales especializados y la absorción de una parte muy significativa de la planificación publicitaria online.

El Gobierno de Justin Trudeau ha elaborado un marco legislativo similar al australiano que está pendiente de aprobación por parte del Parlamento.

Sobre esto último el colectivo de editores News Media Canada publicó en octubre de 2020 un informe titulado Levelling the Digital Playing Field (Nivelando el terreno de juego digital) para documentar la petición de medidas similares a las australianas. En él apuntaba que Google y Facebook abarcaban en conjunto una cuota de mercado del 75% que podía alcanzar el 90% por su efecto red, y eso les permitía imponer términos “injustos y anticompetitivos” a los medios canadienses.

El Gobierno canadiense sitúa ese porcentaje en el 80% y estima que ambas compañías facturan en torno a 9.700 millones de dólares al año por publicidad digital en ese país. Trudeau se había comprometido a promover legislación como la australiana durante la campaña electoral de 2021 y su ministro de Patrimonio Pablo Rodriguez ha sido el encargado de diseñarla. El proyecto también tiene entre sus objetivos evitar que la desinformación emerja a partir de la debilidad de medios creíbles.