Disney+ alcanza el mínimo de suscriptores que tenía como objetivo para 2024
El coronavirus ha afectado gravemente al negocio de parques de atracciones de Disney, pero a cambio ha impulsado su apuesta más seria en el streaming. Disney+ ha llegado con cuatro años de adelanto sobre las previsiones a la parte baja de la horquilla de suscriptores que la empresa manejaba en su lanzamiento, con 60,5 millones sobre la meta de entre 60 y 90 fijada para 2024.
Además es posible que esa cifra reciba un empujón en próximas semanas, ya que Mulan se va a estrenar directamente en ese servicio a principios de septiembre, tras retrasos sucesivos de su pase en cines forzados por la pandemia. Se podrá ver pagando un suplemento sobre el coste mensual de la suscripción, que en el caso de EEUU serán 29,99 dólares, pero también se exhibirá en cines en los que las condiciones sean adecuadas. Será la primera ocasión en la que la plataforma sirva un contenido que haya que pagar más allá del acceso universal, una estrategia comercial que ya viene aplicando Amazon con diferentes productos audiovisuales.
Además Disney va a lanzar un nuevo servicio de streaming bajo la marca Star, que formaba parte de los activos de Fox que compró en 2019, en el que se podrá ver contenido de distintas propiedades del conglomerado. Según confirmó el consejero delegado, irá integrado en Disney+ en algunos mercados. Sumando los suscriptores de esta última a los de Hulu y ESPN+, la compañía ya suma 100 millones de televidentes de pago.
Además la oferta de Disney+ se ha visto reforzada en las últimas semanas con la llegada de otros productos que también estaban planeados para su estreno en cine, como Artemis Fowl o Hamilton. Ese movimiento ha coincidido con el cierre de hasta 20 canales de televisión que emitían fuera de EEUU, cuyo contenido en parte ha ido a parar el servicio de streaming principal de la compañía.
Tal y como sucedió en el trimestre anterior, el buen rendimiento de la emisión bajo demanda es la única nota realmente positiva de los resultados del segundo trimestre de Disney. El área de Parques, Experiencias y Productos encabeza la debacle con un desplome del 85% debido al cierre de instalaciones de ocio durante meses y el bloqueo de cruceros. La imposibilidad de rodar y estrenar películas durante lo peor de la pandemia se ha sustanciado además en una caída del 55% para el estudio cinematográfico. Esos factores junto a gastos derivados de la compra de Fox han dejado pérdidas de 4.720 millones a la compañía en el periodo auditado.
