
El diario suizo Le Matin deja de imprimirse por «sobreabundancia de oferta»
El mercado francés es incapaz de absorber toda la oferta informativa que ofrecen los más de 80 diarios editados en papel. Un problema similar al que padece España, con la diferencia de que en nuestro país se publican un centenar de cabeceras y los hábitos de consumo son inferiores.
Esta situación, para la que los editores españoles tan sólo aciertan a recetar fusiones, ha forzado el fin de uno de los tabloídes suizos más antiguos. Le Matin, fundado en 1893 en francés, dejará de salir a los quioscos a finales del mes de julio. El próximo 21 de julio imprimirá su última edición en papel.
El grupo editor Tamedia confirmó hace unos días lo que durante meses ha sido un rumor creciente. Finalmente se ha optado por dejar de imprimir el diario más leído en la zona francófona de Suiza.
Los responsables de la cabecera han argumentando problemas financieros para tomar esta decisión, derivados principalmente de una ‘sobreabundancia informativa’. «Tras el fracaso de Le Matin du soir, totalmente digital y de pago, las pérdidas en la tirada y la drástica caída de la publicidad en la impresión, el destino de la edición en papel Le Matin estaba sellado», han informado desde el propio medio.
No obstante, seguirá desarrollando su actividad informativa en Internet, convirtiéndose en el primer diario suizo completamente digital. Solución que no evitará un proceso de reestructuración que afectará a 41 trabajadores, incluidos una veintena de periodistas y redactores.
Tamedia ha reconocido que Le Matin llevaba perdiendo dinero durante los últimos 20 años, pero que la situación se deterioró recientemente. Hasta el punto que en la última década se ha dejado cerca de 30 millones de euros y 80.000 lectores, en parte por la competencia de periódicos gratuitos como 20 Minutos y el auge de los medios digitales.
La noticia ha sido duramente criticada por los sindicatos de prensa y por responsables políticos de la Suiza de habla francesa. Sin ir más lejos, Nuria Gorrite, presidenta del cantón de Vaud, declaró que Tamedia es una empresa rentable y con su decisión «está desconectando un popular periódico, uno de los últimos títulos en lengua francesa».