El País y eldiario.es restringen la participación en comentarios a suscriptores y socios

Los dos principales periódicos del ámbito progresista en España han entrado en una nueva fase en cuanto al modelo de participación de sus lectores. Si eldiario.es anunciaba la semana pasada que su comunidad había votado mayoritariamente a favor de que solo los socios pudieran comentar, el defensor de El País dedicó su columna dominical unos días después a hablar sobre cómo la posibilidad de intervenir al pie de las noticias ha quedado limitada a los suscriptores.

En ambos casos los motivos aducidos reflejan los problemas de moderación clásicos en internet, que se han incrementado en esta situación de polarización política: insultos, acoso de unos usuarios a otros o campañas organizadas por colectivos interesados, ya sea con personas reales o no. Con la restricción a quienes pagan por las historias o para que estas se publiquen, ambos periódicos se garantizan en principio un caudal menor de participación, pero de mayor calidad.

De hecho, la medida ha supuesto en El País una reducción del 87%, pasando de los 10.700 diarios en abril a los 1.440 en los primeros días de mayo, tal y como indica el Defensor del Lector. Por su parte, eldiario.es aún no ha implementado lo decidido por su comunidad y tiene previsto hacerlo en los próximos días.

Otra cuestión controvertida asociada es la de la identificación de los lectores que participan, que supone un debate en sí misma. Ya en marzo de 2015 El País incluyó en primer lugar de sus condiciones de participación la obligatoriedad de presentarse con nombre y apellido, mientras que eldiario.es lo ha sometido igualmente a votación entre sus más de 53.000 socios actuales. En este último caso los participantes se mostraron también mayoritariamente a favor de la medida, que contó con el rechazo de quienes deseaban seguir comentando de manera anónima.

Estos ejemplos muestran lo complejo que resulta combinar la idea de plataforma abierta de intercambio de opiniones con la realidad de su moderación, que en el caso de los grandes medios españoles está externalizada a Interactora. Históricamente los comentarios eran uno de los pocos incentivos que tenía cualquier lector para registrarse en una web, algo que hoy forma parte de las estrategias de todos los medios para conseguir crear hábitos y posibles suscriptores.