Paolo VasilePaolo Vasile.

Mediaset defiende la legitimidad del duopolio y advierte a los pequeños: «el mercado tiene la última palabra»

| 27 ABRIL 2017 | ACTUALIZADO: 10 ABRIL 2018 17:33

«El duopolio no lo hemos firmado nosotros un día. Nos lo ha dado el mercado, que ha decidido que tiene que ir comprando espacios y anuncios publicitarios a dos operadores porque son más rentables que los demás».

Es la reivindicación, medio tajante y medio divulgativa, que ha hecho Alejandro Echevarría, presidente de Mediaset España, para hacer valer como legítima la posición de dominio que ostentan su compañía y Atresmedia en la industria audiovisual.

Todos los debates que se encienden en el mercado televisivo se alimentan con la gasolina del duopolio. No hay una cuestión que deje menos indiferente que preguntarse constantemente si el hecho de que Atresmedia y Mediaset acaparen el 85,5% de la cuota publicitaria  televisiva (el 50,3% de la inversión total en medios) es consecuencia del buen hacer de estas compañías e impericia del resto. De acuerdo con la otra postura, que en algunas ocasiones se plantea desde un giro más retórico, este campo se ha ido cultivando ante la inactividad de las autoridades de la competencia, como denuncian los contrarios al duopolio.

El enfrentamiento entre ambas posiciones se ha intensificado en las últimas semanas por un doble motivo: primero por la formación de una asociación televisiva paralela a UTECA integrada por los pequeños operadores de la TDT y, segundo, por las reivindicaciones de la FORTA a la CNMC para que acceda a corregir las ‘prácticas abusivas’ de Atresmedia y Mediaset.

Echevarría, quien también ocupa la presidencia UTECA, ha asegurado este jueves durante la Junta General de Accionistas de Mediaset que «a nosotros nos ha costado diez años poder ganar la batalla al monopolio del Estado, que no tenía limitaciones de ninguna clase». A la pregunta de un accionista referida al duopolio, el directivo vasco ha defendido que han conseguido estar en la situación actual a base de «muchísimo esfuerzo y trabajo». Que al igual que Atresmedia y ellos tardaron años en ser rentables, «los otros operadores que han entrado en el mercado ya conocían la situación que había». En otras palabras, que no tienen razones para sentirse engañados.

Alejandro Echevarría ha asegurado que «los otros operadores que han entrado en el mercado ya conocían la situación que había»

Como ya hizo la patronal ante las pretensiones de la FORTA, el presidente de Mediaset ha querido recordar a los nuevos operadores y arrendadores que han sido «acogidos en una asociación que se llama UTECA, la cual pretende defender los intereses de todo». Y ha añadido: «hay que ser valiente y tener mucha imaginación para poder triunfar en el sector audiovisual. Al final de todo esto la moraleja es que el mercado es el juez implacable y será el que diga su última palabra».

Más directa, y a ratos sentenciosa, ha sido la intervención de Paolo Vasile, consejero delegado de la propietaria de Telecinco. Ha recordado los primeros años de la aventura televisiva de Mediaset en España, regida «por un monopolio del Estado, que no tenía límites de audiencias ni de costes porque estaba protegido por la política y vivía en pérdidas». En este ejercicio de retrospectiva, ha subrayado que el grupo bordeó la situación de quiebra hasta finales del pasado siglo, cuando tomó el mando de la compañía para enderezar su situación. «Desde entonces empezó el crecimiento, la consolidación, la salida a Bolsa y finalmente el éxito que ha llevado a Mediaset España ha convertirse en un caso de estudio».

En clara referencia a las propietarias de licencias que han optado por ceder su explotación a otro grupo, Vasile ha criticado que “a diferencia de otros, que se han acercado a la televisión buscando el ‘pelotazo’, nunca hemos caído en la tentación de buscar un valor ficticio para luego vender”.

Su beneficio se incrementa un 21%, hasta los 60,6 millones de euros

Horas más tarde, Mediaset ha presentado sus resultados correspondientes al primer trimestre del ejercicio, en los que se destaca un incremento del 21% en su beneficio neto. Este crecimiento permite a la propietaria de Telecinco y Cuatro ganar 60,6 millones de euros hasta marzo.

Esta mejora es posible por una relación directa entre el aumento registrado en la facturación, que alcanzó los 240,4 millones de euros (4,2%) y una reducción del 0,5% en la línea de los costes operativos, que se quedan en los 159,2 millones.