Vasile carga contra Vivendi mientras pelea la fusión de Mediaset
Paolo Vasile sale a escena para pelear la reactivación de la fusión paralizada el pasado viernes entre Mediaset Italia y la filial española que comanda.
En una entrevista concedida al nuevo miedo digital del grupo, Nius, el consejero delegado de Mediaset España ha defendido la necesidad de sacar adelante la operación pese a las dudas manifestadas por el juez que aceptó la suspensión cautelar a la espera de que se resuelva la impugnación solicitada por Vivendi.
«Tenemos la obligación profesional de hacer esta fusión. Es indispensable para tener un papel importante en el mundo de la comunicación audiovisual», ha indicado Vasile sobre las razones que motivan esta integración.. «Nosotros ya no somos una empresa de televisión sino una empresa audiovisual. En la televisión ya hemos alcanzado el nivel de excelencia pero ahora tenemos que profundizar en la comunicación audiovisual multiplataforma», añade.
El magistrado que paralizó el proceso cuestiona algunos de los argumentos planteados por Mediaset España en su auto -revelado por Vozpópuli hace unos días-. Así, respecto a la mudanza del grupo a Holanda, duda de que pueda tener un impacto positivo para su negocio, ni tampoco para su plantilla ni su cotización.
Frente a esta argumentación, Vasile expone en la mencionada entrevista que la decisión de radicar la sede de la nueva Mediaset paneuropea en los Países Bajos permite «que los accionistas que se dedican a crear valor en la empresa y que se comprometen a seguir haciéndolo puedan tener más derechos de voto que aquellos que siguen una estrategia de corto plazo buscando solo el rendimiento financiero». Palabras que aluden directamente al interés de Vivendi, que posee el 29% del grupo y en verano compró un 1% para poder impugnar los acuerdos de la junta y bloquear la fusión.
A este respecto, el magistrado del Juzgado de lo Mercantil nº2 considera que el acuerdo de integración parece ir digirigo «blindar el poder de Fininvest en el Grupo Mediaset y, sobre todo, a debilitar y mermar los derechos de Vivendi», de acuerdo con el texto recogido por el mismo diario.
En cambio, para Vasile «Vivendi quiere ganar en España lo que no pudo ganar en Italia. Allí realizó una escalada hostil e ilegal, según han decretado las autoridades en ese país, y no pudo lograr sus objetivos».