Vocento aspira a que la publicidad digital genere tres de cada cuatro euros en 2022
Las empresas editoras persisten en su empeño de aligerar el peso del que durante décadas fue su negocio tradicional y que hoy supone, en ciertos casos, un lastre en su transformación digital: la prensa de papel. Esta reconversión pasa por diversificar al máximo sus fuentes de ingresos.
Sin duda una de las líneas más exploradas es la publicidad digital, la cual si bien ha crecido por debajo de lo esperado en los últimos tiempos, todavía presenta un amplio margen de aumento. En Vocento, por ejemplo, durante el 2018 el 60% de la facturación publicitaria se obtuvo por la vía digital, frente al 40% de la impresa, en clara contracción desde hace años. Y la idea es que la primera represente cada vez más.
Según la presentación a inversores desvelada este martes, la editora de ABC aspira a seguir escalando en publicidad digital durante los próximos años. Así, si se cumplen los objetivos previstos, la parte online aportará el 64% de la tarta publicitaria a finales de este año, y el 75% en 2022. Dicho de otro modo, espera que en cuatro años tres de cada cuatro euros procedan del segmento digital.
Este impulso vendría protagonizado por los anuncios clasificados, que actualmente representan el 9% de la publicidad en Internet del grupo vasco, pero confía en que se duplique hasta el 18% para 2022. Para entonces, el ebitda generado por esta modalidad superaría los 10 millones de euros anuales.
Vocento espera que la programática suponga el 73% de los ingresos publicitarios digitales en 2022.
También será clave la evolución de la publicidad programática, el vídeo, el branded content y el marketplace organizado junto a Prisa y Godó y que está pendiente de la autorización de la CNMC para operar. De estas cuatro palancas, las previsiones de Vocento apuntan a que la primera duplicará su peso en los próximos cuatro años, pasando del 34% sobre display en 2019 al 73% en 2022.
Con todo, Vocento destaca como ejes de la transformación en su negocio de prensa la búsqueda de eficiencias, en el que se enmarca el acuerdo de impresión alcanzado con Prisa en 2017; la potenciación del modelo de suscripción en sus ediciones digitales, cuya facturación puede alcanzar los 3,8 millones de euros en el mediano plazo; el foco en data (marketplace) y la exploración de nuevas fuentes de ingresos; digitales o por eventos.