Ximo Puig, presidente de la Generalitat Valenciana y accionista de uno de los principales periódicos de la región

| 15 JULIO 2019 | ACTUALIZADO: 16 JULIO 2019 11:58

El socialista Ximo Puig compatibiliza la presidencia de la Generalitat Valenciana desde el año 2015 con la de ser accionista del periódico Mediterráneo, uno de los principales diarios de la región.

El político socialista trabajó como periodista en los años 70 y 80 en el citado medio. Fue despedido y con la indemnización recibida decidió, junto con otros trabajadores igualmente cesados, comprar acciones de la cabecera. Desde entonces, Puig es propietario del 1,2% del capital de la sociedad editora, participación valorada en 117.000 euros.

Este periódico era una de las cabeceras regionales del Grupo Zeta, holding que ha sido recientemente adquirido por Prensa Ibérica. Para cerrarse esta operación, hubo que hacer una condonación del 70% de la deuda contraída por la editora de Mediterráneo con el Instituto Valenciano de Finanzas, entidad de carácter público adscrita a la Generalitat Valenciana. Este organismo perdonó a Mediterráneo un total de 1,3 millones de euros para poder ser traspasado a Prensa Ibérica.

Según consta en la declaración de bienes de Ximo Puig, durante los años 2016 y 2017 ha percibido unos dividendos de la editora de Mediterráneo de 12.000 euros. Esto ha sido posible porque en esos dos ejercicios la sociedad arrojó un beneficio de más de 500.000 euros en cada uno de ellos. En 2017 los dividendos repartidos entre sus accionistas llegaron a los 504.000 euros y un año antes, a los 558.000 euros. Entre los ejercicios 2008 y 2015 no hubo distribución de dividendos; cuando todavía no gobernaba Puig en la Generalitat Valenciana. Antes de la crisis, sí que se repartieron cuantiosas ganancias entre sus accionistas.

El periódico Mediterráneo comenzó a repartir dividendos cuando accedió Ximo Puig a la presidencia de la Generalitat Valenciana.

Esta buena salud financiera del periódico Mediterráneo se produce pese a la caída de ventas de ejemplares, cuyo aporte al negocio en 2017 fue de 2,1 millones de euros; un 6% menos que un año antes.

Justo el doble aporta la publicidad, que creció a un ritmo del 7% en 2017; en un contexto de desplome de los ingresos por anuncios en la inmensa mayoría de los periódicos en papel desde hace ya más de una década. Desde el año 2015 -el primero de de mandato de Puig-, Mediterráneo ha percibido unos 500.000 euros en publicidad institucional.

Con la adquisición de los activos del Grupo Zeta, Prensa Ibérica se ha convertido en el grupo editorial más potente de la Comunidad Valenciana. Posee, además de Mediterráneo, las cabeceras de Información y Levante. En este último, el grupo de Javier Moll ha efectuado recortes de personal, precisamente por producirse duplicidades con el periódico Mediterráneo, por el que ha apostado con fuerza Prensa Ibérica.