Zeta valoraba en 48,2 M El Periódico de Catalunya antes de cerrar su venta
Aunque la compra del Grupo Zeta a manos de Prensa Ibérica transcendió semanas antes del anuncio oficial, hay muchos detalles de la operación que pasaron desapercibidos. Al fin y al cabo, entre la bendición de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), a mediados del pasado mayo, y la puesta en venta de la compañía editora transcurrieron casi dos años. Tiempo en el que se produjeron varios giros de guión.
Por ejemplo, en un primer momento el plan de viabilidad elaborado por Deloitte a encargo de la banca acreedora contemplaba vender únicamente una parte de sus activos. En concreto, planteaba que Zeta debía desprenderse de El Periódico de Extremadura, El Periódico de Aragón y La Crónica de Bajadoz para salvar sus cuentas. Es decir, tres de los seis diarios regionales que edita.
Otra de propuestas pasaba por colocar todas las revistas (opción que se descartó tras el cierre de Tiempo e Interviú), o externalizar y vender los activos inmobiliarios que posee en varias regiones del territorio nacional.
El documento excluía por tanto a El Periódico de Catalunya y Sport del proceso de venta. De hecho recomendaba mantener ambas cabeceras, actuales joyas de la corona de Zeta, dentro del perímetro y potenciar su digitalización.
El desenlace de la operación es de sobra conocido. La compañía de Javier Moll se hizo con la propiedad de todos los medios por apenas 10 millones de euros. Precio que estuvo condicionado por el agujero económico acumulado durante la última década y su elevada deuda con entidades de crédito, que a cierre de 2018 ascendía a 90 millones de euros.
En 2015 la cabecera estaba valorada en 60,2 millones de euros
Estos condicionantes no quitan que Prensa Ibérica hiciese valer una oferta muy por debajo del valor contable de los activos de Zeta. Especialmente en el caso El Periódico de Catalunya, cuya valoración a 31 de diciembre del año pasado era de 48,2 millones de euros.
De este modo, apenas unos meses antes de cerrarse la venta, cuando las ofertas planteadas todavía llegaban a los 40 millones de euros, el grupo estimaba que su principal activo valía casi cinco veces la cantidad que se terminó pagando por toda sucartera.
Aunque este valor no contemplaba indicios de deterioro producidos durante ese ejercicio, sí destaca que la marca había sufrido una depreciación de 12 millones de euros desde 2015, cuando se constituyó la sociedad El Periódico de Catalunya S.L. En ese momento su valoración era de 60,2 millones de euros.
Si bien el primer punto prescrito por Deloitte no se cumplió ante el riesgo que suponía para la viabilidad del grupo venderlo por trozos, hace tiempo que se viene trabajando en la cuestión de la digitalización del diario. De hecho, el actual equipo directivo está poniendo muchos recursos en intentar reflotar la situación de El Periódico de Catalunya.
Su situación es especialmente delicada, dado que gran parte de la deuda asumida por Prensa Ibérica hace referencia al contrato de financiación firmado por el diario con el pool de bancos acreedores. Sin ir más lejos, a 31 de diciembre de 2018 la sociedad editora de El Periódico presentaba un endeudamiento de 57,2 millones de euros, lo que equivale a casi dos tercios de todo el pasivo de Zeta.
