Coca Cola apuesta por el ecodiseño y la innovación en sus nuevos envases

| 29 DICIEMBRE 2020

Los envases, las latas y botellas son esenciales en la industria alimentaria, no solo para la imagen de marca, su calidad hace que los alimentos y bebidas nos lleguen e nuestras casas, a nuestros restaurantes y bares de forma segura conservando todas sus propiedades. Además, en fundamental que tengan el menor impacto ambiental en su diseño, y para todo su ciclo de vida, desde la extracción de las materias primas hasta su reciclaje, reutilización o eliminación para reducir el daño irreparable en la naturaleza.

Es por ello por lo que Coca-Cola en España, con la sostenibilidad en el centro de su modelo de negocio, lleva años apostando por la innovación y el ecodiseño para ofrecer a los consumidores envases más sostenibles.

Ecodiseño para reducir la huella ambiental de los envases

Así, Coca-Cola diseña sus latas y botellas teniendo en cuenta la huella ambiental asociada a su producción, distribución y consumo para reducirla al máximo. Esto se consigue, por ejemplo, aligerando su peso y aumentando el porcentaje de material reciclado para emplear menos recursos, aunque también innovando para facilitar su reciclaje y desarrollando novedosas alternativas a los envases tradicionales.

Actualmente sus latas y botellas son más ligeras y contienen más material reciclado. De hecho, el peso de la botella Contour, la clásica que todos guardamos en nuestra memoria, de vidrio rellenable, la más icónica de la marca Coca-Cola, se ha reducido un 21% con respecto al año 2000, la botella de plástico de 2 litros ha disminuido su peso en un 35% desde 2010 y las latas pesan hasta un 60% menos que hace 30 años.

En cuanto a la cantidad de material reciclado, actualmente las botellas de plástico de Coca-Cola tienen un 25% de plástico reciclado, en 2017 era el 13%, y el objetivo es elevar ese porcentaje al 50% antes de 2022.

Los esfuerzos también se centran en mejorar los envases para que sean más fáciles de reciclar. Así, por ejemplo, se ha eliminado la coloración verde de las botellas de Aquabona con gas, lo que permite que, al reciclarse, puedan ser transformadas en nuevas botellas. De este modo, el 99,6% de los envases de Coca-Cola son completamente reciclables.

No todo el esfuerzo va a las botellas y latas que nos llegan como consumidor final, también se trata de mejorar la reciclabilidad de los embalajes y eliminar el plástico innecesario. De esta manera, a finales de 2019 Coca-Cola sustituyó la envoltura plástica de sus multipacks de latas por una de cartón 100% reciclable y con certificación PEFC, que asegura que procede de bosques sostenibles. También suprimirá las anillas de plástico de sus packs de latas, reemplazándolas por otras de cartón.

Innovación como base para un mundo sostenible

Junto al ecodiseño, Coca-Cola invierte continuamente en innovación, colaborando con empresas punteras para lograr una mayor sostenibilidad de sus envases. En este sentido, a finales de 2019 presentaba, de la mano de Ioniqa Technologies, la primera botella elaborada con plástico reciclado procedente de basura marina, logrando transformar plástico muy degradado en materia prima de alta calidad para uso alimentario, algo que no se podía hacer hasta la fecha.

Un año después, en octubre de 2020, hacía pública una nueva innovación, junto a la start-up PaBoCo, siglas de The Paper Bottle Company. Se trata de un primer prototipo de botella hecha de papel, un material renovable, fácilmente reciclable y biodegradable, lo que abre todo un mundo de posibilidades.

Además, Coca-Cola European Partners financia CuRe Technology, empresa emergente que trata de dar nuevos usos a residuos plásticos difíciles de reciclar. Esto significa que los plásticos con impurezas, que a menudo se destinan a la incineración o son llevados a los vertederos, ahora pueden recibir una nueva vida. También supone que habrá más material disponible para el reciclado, lo que reducirá la cantidad de plástico virgen que se emplea.

Hacia un futuro cercano en el que los envases no dejen rastro

Todos estos esfuerzos de Coca-Cola en España para que los consumidores puedan seguir disfrutando de sus bebidas, al tiempo que sean conscientes de no estar acabando irremediablemente con el medio ambiente y, por tanto, con el planeta, forman parte de Un Mundo sin residuos. Un plan de la compañía a nivel global que contempla todo el ciclo de vida de un envase, desde cómo se diseña y fabrica, hasta cómo se recicla y reutiliza.

Los compromisos de este plan son muy ambiciosos. Para el año 2030 quiere recoger y reciclar el equivalente al 100% de los envases comercializados, que el 100% de sus envases sean reciclables y que el 50% de todos los materiales utilizados en su fabricación sean reciclados.

En Europa, este plan se ha agilizado, dentro de la estrategia Avanzamos, adelantando los dos primeros compromisos a 2025 con el compromiso de que sus envases contengan al menos un 50% de plástico reciclado para ese año.

Ejemplo de este compromiso en España es Mares Circulares. No solo hay que empezar la cadena de fabricación sosteniblemente, también hay que limpiar y solucionar todo lo hecho hasta ahora de forma horrible para la naturaleza. Éste es un proyecto de colaboración que, siguiendo el modelo de la economía circular, limpia de residuos playas, espacios protegidos y fondos marinos, trata de sensibilizar a los ciudadanos sobre la importancia del reciclaje y apoya cada año tres estudios científicos y una iniciativa empresarial que aporten soluciones al problema de la contaminación marina.

En un mundo en el que cada vez somos más conscientes de la urgencia de proteger el medioambiente, es esencial que los residuos vuelvan a entrar en la cadena productiva mediante el reciclaje y la reutilización. Este es el camino. A través del ecodiseño y la innovación, y de un compromiso firme de todos con la salud de la Tierra, trabajar por un futuro cercano en el que los envases sean completamente sostenibles.