El Corte Inglés consigue la certificación «Residuo Cero» de AENOR
El Corte Inglés ha obtenido la codiciada certificación «Residuo Cero» de AENOR para todas sus tiendas El Corte Inglés e Hipercor, así como para sus plataformas logísticas, abarcando un total de 140 establecimientos.
Este logro histórico ha facilitado la valorización de más de 56.086 toneladas de residuos durante el año 2022, lo que representa un notable 94,34% del total de los desechos producidos por sus operaciones. Se alinea con los principios de una economía circular, ya que opera bajo el principio de que «todo residuo producido es gestionado, y todo residuo gestionado es valorizado». La eficacia de este modelo queda demostrada por su capacidad para valorizar más del 90% de los residuos generados.
La siguiente fase para la compañía consiste en la búsqueda de la certificación Residuo Cero para todos sus outlets, incluidos los supermercados Supercor y Supercor Express, con el objetivo de completar este proceso antes del año 2026.
Para alcanzar su objetivo, El Corte Inglés ha adaptado meticulosamente sus operaciones en centros y almacenes para alinearse con prácticas sostenibles, mitigando la huella ecológica de sus actividades.
El Corte Inglés comenzó esta iniciativa en Galicia, el año 2018 en Galicia y un año más tarde se convirtió con orgullo en la primera empresa minorista española en obtener la certificación Residuo Cero de AENOR para sus centros comerciales. Desde entonces, la iniciativa ha ampliado su alcance para abarcar diversas regiones, incluyendo Asturias, Castilla y León, Cantabria, Aragón, Navarra, el País Vasco, la Comunidad Valenciana, Murcia, Andalucía, Cataluña, las Islas Baleares e incluso Portugal. Los avances de este año incluyen la incorporación de instalaciones en Castilla-La Mancha, la Comunidad de Madrid, las Islas Canarias y Girona, sumando un impresionante total de 140 establecimientos y plataformas de El Corte Inglés certificados.
La certificación Residuo Cero de AENOR ayuda a las organizaciones a optimizar sus procesos, con un enfoque específico en los puntos de generación de residuos. Este esfuerzo contribuye significativamente a impulsar la Economía Circular, priorizando la reutilización y el reciclaje al transformar los residuos en materias primas para un nuevo uso.
Actualmente, las operaciones del grupo generan más de 50 categorías distintas de residuos, que se segregan cuidadosamente para su valorización. Estos flujos de residuos provienen tanto de las actividades centrales del negocio como de los hogares de los clientes.
Entre los proyectos más destacados a la hora de evitar la generación de residuos están los convenios con diferentes entidades para evitar el desperdicio alimentario. En el ejercicio se han donado al Banco de Alimentos y otras entidades benéficas un total de 4.810.000 kg de alimentos que, siendo seguros para su consumo, no llegaron a comercializarse y fueron repartidos entre numerosos hogares. Además, existen acuerdos con parques naturales, granjas y zoológicos para el aprovechamiento de alimentos no aptos para el consumo humano.
También cabe destacar la reorganización de las rutas logísticas y la optimización de la carga de los vehículos –con la consiguiente reducción de las emisiones de CO2, la transformación de residuos en nuevas materias primas y el fomento de la economía circular mediante el reciclaje, la reutilización y la recuperación de aparatos electrónicos.