LinkedIn sigue los pasos de Twitter y liquida su versión del formato de historias por falta de uso

| 1 SEPTIEMBRE 2021 | ACTUALIZADO: 2 SEPTIEMBRE 2021 17:52

A finales de septiembre termina el experimento un año con el que LinkedIn ha tratado de introducir el popular formato de historias en su plataforma para potenciar el consumo de vídeo informal. La red social ha comprobado que sus usuarios no están interesados en contenido efímero y ha indicado que va a aproximarse de una manera distinta al vídeo corto. Es un desenlace similar al de Twitter, que decidió igualmente hace pocos días dar carpetazo a su adaptación tras apenas siete meses.

El fracaso del formato en ambos entornos reduce su eficacia fundamentalmente a la red social que lo creó (Snapchat) y la que lo copió en primer lugar (Instagram, para después extenderlo a Facebook), además de su aplicación al esquema AMP de Google. En el resto de casos la aceptación ha sido moderada o baja pese a haberse convertido prácticamente en un estándar de narrativa en internet para consumo en móviles en los últimos cinco años.

Uno de los aspectos que hace atractivas a las historias es la posibilidad de escalar impresiones publicitarias entre diapositivas e ingresos asociados, algo que tanto LinkedIn como Twitter esperaban conseguir. Por contra, en su anuncio de cese del formato ha advertido a los anunciantes que hubieran comprado espacios en ellos que las campañas serán redirigidas al flujo principal de publicaciones. Aquellos que hubieran optado por patrocinar o promocionar historias directamente desde su página tendrán que rehacerlas.

Ahora queda por ver el alcance de la apuesta por el vídeo corto de LinkedIn, ya que es un formato en alza pero en entornos con usuarios y pautas de comportamiento diferentes. El gran catalizador ha sido TikTokdonde precisamente han surgido usuarios que aprovechan el formato para ofrecer consejos útiles para la vida laboral. El éxito en la aplicación china ha impulsado las apuestas sucesivas de Snapchat, Instagram o YouTube, que además implican desembolsos importantes de dinero para atraer a los creadores que mejor contenido puedan realizar.

El fenómeno de la clonación de las historias se ha repetido en cierta forma en los últimos tiempos con la introducción sucesiva en distintos entornos de funcionalidades inspiradas en Clubhouse, la aplicación de audio en directo. LinkedIn está precisamente trabajando en una de ellas.