MADRIGAL, 1. Tus ojos son grandes, mi amor. Como llantas de tractor. HAPPY HOUR. Ponte guapa, alma mía, que esta noche salimos a cenar: aféitate bien, deja ya de leer a Schopenhauer, échate la colonia esa que apesta a nectarina, ríe, sonríe, recibe todo como un don, ponte la camisa de triunfar y sácales un […]