LLYC, Kreab y Acento lideran el mercado de los asuntos públicos

El sector de los asuntos públicos en España vive un momento dulce. Las multinacionales, pymes y organizaciones de la sociedad civil cada vez tienen más en cuenta la importante labor de interlocución estratégica con las administraciones públicas como forma de trasladar sus inquietudes, preocupaciones o propuestas de futuro. Una tarea que tradicionalmente se ejercía en el seno de las propias empresas y que, en los últimos tiempos, tiende a externalizarse en favor de empresas especializadas.

En este sentido, el mercado de la consultoría de asuntos públicos está viviendo un proceso de maduración y reconfiguración en el que tres empresas se han posicionado como líderes destacados en el sector. Se trata de LLYC, Kreab y Acento. Las dos primeras con una larga tradición en la combinación de la gestión de los asuntos corporativos y de comunicación; y la tercera, de reciente llegada al mercado pero enfocada exclusivamente en la labor de asuntos públicos, copan el grueso del negocio de la consultoría de relaciones institucionales.

Fuentes sectoriales calculan que estas tres consultoras concentran el 80% del negocio de estos servicios en nuestro país en la actualidad, y que actualmente en España se estima en unos 25 millones de euros, en comparación con mas de 1.500 millones de euros en el conjunto de la industria del lobby en EE.UU, según Bloomberg. El informe de Bloomberg asegura que el 58% de las consultoras incrementaron más de un 20% sus ingresos anuales en el 2019 y las fuentes españolas consultadas aseguran que en nuestro país estas tres empresas pueden alcanzar un crecimiento anual del 30% en el área de asuntos públicos.

El top 3 esta repleto de líderes políticos de primer nivel que cubren las distintas posiciones políticas y gubernamentales de los últimos tiempos, y en especial de los últimos Gobiernos del PP y de PSOE, que cubren los últimos 15-20 años legislativos. L

LYC lidera el sector y ha sido el gran pionero en nuestro país. Entre su equipo destacan figuras como las de José Luis Ayllón (ex jefe de Gabinete de Mariano Rajoy) o Joan Navarro (ex director del Gabinete del Ministro de Administraciones Públicas); así como asesores como Constantino Méndez (ex secretario de Estado de Defensa), Luz Rodríguez (ex secretaria de Estado de Empleo), Fernando Moraleda (ex secretario de Estado de Comunicación) o Jordi Sevilla, ex ministro y ex presidente de Red Eléctrica de España, como responsable de Contexto Económico.

Por su parte, Kreab ha vivido en los últimos tiempos una importante restructuración, y entre su equipo directivo actual cuenta con Javier Dorado (ex Director General de Juventud y ex Secretario General de Nuevas Generaciones), Miguel Ferre (ex Secretario de Estado de Hacienda), Xavier Cima (exdiputado de CiU en el Parlament de Cataluña y marido de Inés Arrimadas), Rafael Catalá (ex Ministro de Justicia) y Santi Vila (ex Consejero de la Generalitat de Catalunya) .

En el caso de Acento, fue fundada por José Blanco, ex ministro de Fomento; y Antonio Hernando, ex portavoz del PSOE en el Congreso, y presidida por Alfonso Alonso, ex Ministro de Sanidad. Esta boutique de asuntos públicos también cuenta con un plantel de colaboradores compuesto por diferentes personalidades como Valeriano Gómez (ex Ministro de Trabajo) o José María Lassalle (ex Secretario de Estado de Cultura y de la Sociedad de la Información y Agenda Digital), que han ostentado altas responsabilidades públicas en diferentes gobiernos de distinto signo político y que le otorga una visión completa e integral de la gestión de las relaciones institucionales.

Todas ellas cuentan con una estructura técnica con profesionales especializados en relaciones institucionales en los distintos niveles de la administración, expertos en procesos regulatorios, análisis parlamentario y perfiles cualificados en diversas materias.

LLYC, Kreab y Acento concentran el 80% del negocio de estos servicios en nuestro país en la actualidad, y que actualmente en España se estima en unos 25 millones de euros.

Fuentes corporativas consideran fundamental la profesionalización y la modernización de este sector y aplauden la creación de equipos altamente cualificados, especializados y con profundidad en los asuntos públicos capaces de garantizar una correcta interacción entre el mundo corporativo y la esfera institucional. Añaden, además, que es un tema muy serio que requiere de equipos multidisciplinares, profesionales con amplios conocimientos de las diferentes instituciones del Estado y con una dilatada experiencia en la imprescindible colaboración público-privada. El sector de las relaciones públicas y la comunicación corporativa siempre ha asumido como propio este territorio de los asuntos públicos, pero requiere en definitiva de equipos transversales, propios y especializados. 

Por debajo del podio que encabezan estas tres grandes marcas, se ubican varias agencias de diferente perfil, algunas de carácter sectorial, otras que combinan las relaciones públicas con la comunicación y otras que tratan de adquirir mayor visibilidad por medio de la proliferación de asociaciones minoritarias.

En cualquier caso, se trata de un mercado en auge en el que la multiplicidad de actores políticos, la descentralización del sistema autonómico y la regulación de nuevos sectores profesionales convierten la actividad de la consultoría de asuntos públicos en una de las áreas más relevantes de cualquier compañía como en el pasado pudieron ser los departamentos de marketing o atención al cliente.