Weber Shandwick ha descabezado la cúpula directiva que ha estado al frente de la multinacional en España durante los últimos años. Si en junio salió de la firma su director general, Francisco Porras; ahora la que abandona la compañía es Rose de la Pascua, que viene ejerciendo como CEO durante los últimos diez años.
En su lugar, Raquel Capellas y Natalia Sánchez han sido designadas como co-directoras generales de Weber Shandwick en España. Ambas profesionales cuentan con más de 20 años de experiencia en comunicación y formaban parte del Comité de Dirección de Weber Shandwick como responsables de la dirección estratégica de las áreas de corporativo, public affairs y consumo desde hace más de cinco años. A partir de ahora dirigirán todas las operaciones de la agencia en España, para lo que llevan trabajando los últimos meses de manera muy estrecha con Rose de la Pascua, que dejará su puesto como CEO de la compañía a finales de enero, por motivos personales.
Raquel Capellas es Licenciada en Publicidad y Relaciones Públicas por la Universidad Complutense de Madrid y ha realizado estudios de doctorado en sociología y comunicación por la misma Universidad. A lo largo de su trayectoria profesional se ha especializado en reputación corporativa y gestión de crisis donde además ejerce como docente y colaboradora en diversas instituciones académicas.
Por su parte, Natalia Sánchez también es Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y es profesora de Comunicación Internacional en el master del CEU San Pablo. Tiene amplia experiencia en la definición de estrategias de comunicación integrales con propósito corporativo en medios propios, ganados y pagados, en gestión de crisis y en la comunicación de intangibles que contribuyen a la mejora de la reputación. Su conocimiento y experiencia en el área TI le permite comprender mejores modelos disruptivos y el impacto que la tecnología tiene en los diferentes sectores.
Este descabezamiento de la cúpula directiva que venía ejerciendo el liderazgo en la oficina española de Weber Shandwick durante los últimos años se produce al tiempo que la firma ha ido perdiendo influencia y negocio en nuestro país. Y eso que a nivel global esta compañía del grupo IPG es la segunda consultora de comunicación más grande del mundo por ingresos. En España, sin embargo, esta fuera de top ten de agencias más importantes, con una facturación de apenas 5,4 millones de euros en 2018 (último ejercicio disponible en el Registro Mercantil).
