El fraude publicitario lleva a Google a devolver parte de sus ingresos a anunciantes

| 30 AGOSTO 2017 | ACTUALIZADO: 31 AGOSTO 2017 13:32

En las últimas semanas Google se ha visto obligado a reembolsar parte del dinero que habían pagado cientos de agencias y anunciantes por anunciarse. En algunos casos, los anuncios acababan alojados en sitios webs que generan un tráfico falso, según ha informado The Wall Street Journal.

Los anuncios afectados se contrataron a través de DoubleClick Bid Manager, una plataforma destinada a la compra de publicidad programática. A Google no le ha quedado otra que dar parte del problema a los anunciantes tras su detección, que ha sido posible gracias al uso de una herramienta de transparencia en la que trabaja desde hace tiempo el buscador.

Pero una cosa es el diagnóstico que se hace y otra muy diferente el remedio a aplicar. La compañía se ha ofrecido a reembolsar una fracción del total de la compra de anuncios. Este anuncio ha provocado malestar entre los ejecutivos afectados, puesto que la «tarifa de su plataforma», la parte a la que se refiere Google, representaría entre el 7% y el 10% del total.

De esta forma, sin saber a ciencia cierta cuál es el porcentaje de anuncios que no se han servido, y aún asumiendo el error propio, el buscador tan sólo da su mano para compensar, como mucho, el 10% de la inversión recibida.

Para Google, se trata de la cuantía apropiada, ya asegura que no controla el resto del dinero. Por lo general, los anuncios contratados a través de DoubleClick se sirven en numerosos sites en cuestión de segundos, lo que dificulta bastante la labor de rastreo. El problema surge cuando, en la diversificación de intercambios, la publicidad termina en sitios con tráfico falso, resultado de la acción de robots y no de usuarios. En estos casos, recuperar la inversión se vuelve prácticamente imposible.

 

El problema, por tanto, no es nuevo, aunque sigue sin haber soluciones que contenten a todas las parte. Y es que, si bien es habitual que los anunciantes reciban pequeños créditos de parte de Google cuando detectan discrepancias, pero en este caso, para algunos compradores, el caso de fraude ha sido mayor del habitual.

Scott Spencer, director de gestión de productos de Google, ha reconocido que los reembolsos ya se han realizado, pero no ha dado ninguna cifra. «Hoy en día, no podemos revelar la información sobre terceros. Así que cuando no somos capaces de atrapar tráfico no válido antes de que afecte a nuestros anunciantes y no podemos reembolsar su gasto en medios, nos duele, aunque no seamos responsables», ha comentado este ejecutivo a The Wall Street Journal.