La facturación publicitaria de YouTube encadena dos trimestres a la baja y el beneficio de Google se desploma un 34%
Los resultados del último trimestre de 2022 han aflorado las dificultades de Alphabet, empresa matriz de Google, que han derivado hace algunas semanas en los primeros despidos masivos de su historia. El gigante de las búsquedas facturó algo más de 76.000 millones de dólares, un 1% más que en 2021, pero su beneficio se hundió un 34%, hasta los 13.600 millones. Esa última cifra supone el cuarto trimestre consecutivo a la baja, una tendencia negativa a la que ahora se une el segundo de YouTube en retroceso, con un 8% de revés frente al año pasado.
Todos los segmentos de ingresos comerciales registraron caídas en el contexto de la ralentización de planificación publicitaria por el complejo contexto macroeconómico, y esa partida general se quedó un 4% por debajo de lo obtenido en 2021. Esta situación explica que el discurso del consejero delegado Sundar Pichai hablara de “reorganizar nuestra estructura de costes de una manera duradera” y su directora financiera Ruth Porat remarcara que el objetivo es asignar las inversiones a “nuestras prioridades más altas de crecimiento para conseguir crecimiento rentable y a largo plazo”.
Respecto a lo primero, además del ajuste de plantilla en un 6% con el despido de 12.000 empleados, Google está reduciendo los inmuebles que tiene alquilados y planea revisar sus contratos con proveedores. Estas y otras medidas sumarán en torno a 2.500 millones de euros invertidos en reestructuración a lo largo del primer trimestre de este año.
Además, la compañía también tiene previsto como impulsar la productividad con la automatización de tareas mediante inteligencia artificial. Ese concepto es clave para su futuro y por ello ha decretado recientemente un código rojo que movilizará todos los recursos necesarios para hacer frente a la aplicación de respuestas generadas automáticamente ChatGPT como eventual amenaza para su negocio de búsquedas. De hecho, Google ha anunciado un evento sobre inteligencia artificial el 8 de febrero en el que dará más detalles de estos esfuerzos.
El gigante de las búsquedas acumula cuatro periodos consecutivos con beneficios por debajo del año anterior y se está reestructurando internamente para darle la vuelta a la situación.
Esas mejoras pueden ser cruciales igualmente para YouTube, cuyo formato de vídeos cortos ya ha superado los 50.000 millones de visualizaciones diarias y mejora en un 30% el dato del año pasado. Ese despegue, ya cubierto comercialmente por la ampliación del programa Partner para creadores, es una de las pocas buenas noticias que aportan las cuentas presentadas. La otra es el incremento en un 32% de la facturación de la división de servicios en la nube, que en todo caso sigue siendo deficitaria tras años de fuertes inversiones para consolidarla.
