Mark Zuckerberg.

Senadores de EEUU investigarán a Facebook por documentos internos en los que reconoce la toxicidad de Instagram

| 17 SEPTIEMBRE 2021 | ACTUALIZADO: 20 SEPTIEMBRE 2021 8:57

La publicación seriada de documentación interna de Facebook por parte de The Wall Street Journal ya ha causado el primer impacto relevante. Los líderes del subcomité de Comercio para la Protección del Consumidor en el Senado han anunciado que promoverán una investigación sobre la compañía para dilucidar el efecto de Instagram sobre los jóvenes, especialmente las adolescentes. Ese grupo figuraba como el más perjudicado por las dinámicas comparativas de esa red social en archivos y comunicaciones que ahora han aflorado.

Entre otras cosas, esa documentación refleja que el 32% de las chicas jóvenes indicaban que Instagram las hace sentir todavía peor cuando se sienten mal respecto a sus cuerpos. Y otras vinculaban directamente el uso de la red social al aumento de sus niveles de ansiedad y depresión. Instagram respondió a esta publicación explicando que está buscando formas de mostrar diferentes contenidos, precisamente con el objetivo de aliviar la presión sobre aquellas personas que puedan sentirse perjudicadas por la comparación con el físico de otros usuarios.

Los senadores Marsha Blackburn (republicana) y Richard Blumenthal (demócrata) se han conjurado para llegar tan lejos como sea posible en la investigación que promueven, e incluso han indicado que están en contacto con un informante interno de Facebook que podría ofrecerles más documentación. En paralelo Mark Zuckerberg ha recibido una carta firmada por un grupo de parlamentarios demócratas de ambas cámaras del Congreso de EEUU en la que le piden que ofrezca explicaciones y que cancele la versión de Instagram para niños que anunció hace meses. Ya en mayo esos representantes pidieron lo mismo debido a que consideran acreditado que Facebook no es diligente en la protección de la salud y la privacidad de menores.

En este asunto la presión para la red social llega desde los dos lados del Atlántico, ya que en Reino Unido las plataformas están obligadas a presentar al regulador Ofcom una evaluación de riesgos del contenido que causa daño a los usuarios. El hecho de que la información contenida en los archivos publicados por The Wall Street Journal no fuera revelada según establece la ley podría conllevar una multa de hasta el 10% de los ingresos anuales, cifra que alcanzaría los 6.000 millones de dólares en el caso de Facebook.