El Confidencial lanza su propio buzón de filtraciones seguro

Filtraciones como la de la conocida lista Falciani en 2010 han favorecido la reconciliación del periodismo con la investigación. Propiciaron el reverdecimiento  de este género justo cuando la crisis sacudía con más fuerza a los medios, afectando a su labor informativa.

Muchos de los trabajos de investigación periodísticos parten, en la mayoría de los casos, de una simple pista anónima. En Internet, donde a diario se depositan infinidad de datos personal, esto resulta extremadamente complicado. Aunque el desarrollo tecnológico es ubicuo y actualmente hay herramientas y organizaciones capaces de garantizar la privacidad y la seguridad de las personas que filtran.

El Confidencial es uno de los últimos medios en condiciones de poder proteger el anonimato de sus fuentes. Acaba de lanzar su propio buzón seguro, el cual ha sido desarrollado por GlobalLeaks. Se trata de la misma organización que está detrás de Fíltrala, la herramienta que comparten eldiario.es, La Marea, Diagonal y la revista Mongolia. En el caso de El Confidencial, todo el material que se envíe al buzón les llega en exclusiva.

«Llevamos años trabajando con filtraciones y hemos visto el potencial que tiene. Creemos, y estamos bastante convencidos, en las garantías de crear un canal que garantice la confidencialidad y el anonimato de la fuente en un mundo tan hiperconectado», explica Daniele Grasso, periodista de datos de El Confidencial. «No hay ningún tiempo de garantía de que el informador esté protegido», responde respecto a las razones que les han llevado a lanzar ahora este buzón.

Varios canales de comunicación

El hecho de que ningún mecanismo sea invulnerable obliga a extremar las precauciones y tomar medidas adicionales. A fin de proteger la identidad de la fuente, El Confidencial ha habilitado varios canales de comunicación, si bien recomiendan utilizar el buzón seguro, accediendo a través del navegador Tor y mediante una red WiFi pública.

Este navegador borra el rastro de la persona que navega, lo cual permite establecer un canal seguro pero también suponer no conocer la verdadera identidad de la fuente. Sea como fuere, se trata de una apuesta por el periodismo investigación, como ya se encargó de destacar el propio medio en el anuncio de sus resultados de 2016, donde superó los 14 millones de euros de ingresos.

En la nota que publicó para dar a conocer sus últimos datos económicos, destacaba que la inversión efectuada en recursos propios en los últimos años le habían permitido conformar una redacción referente por su periodismo de investigación, análisis y calidad. Y que al mismo tiempo, «con el objeto de seguir en esta línea de calidad, rigor y excelencia», había ampliado su plantilla hasta los 135 empleados con la incorporación de periodistas destacados.

Este lanzamiento se produce casi paralelamente a la unión de un nuevo consorcio de medios europeos sobre datos, denominado European Data Journalism Network, y al debate interno que mantienen sus responsables acerca del modelo empresarial a seguir; en el cuál se plantea mantener sus raíces o empezar a perseguir las audiencias.