El consejero delegado de Bloomberg Media abandona el puesto para lanzar un nuevo medio

Justin Smith, hasta la fecha primer ejecutivo de la división de contenidos de Bloomberg, ha dimitido con efectos inmediatos para poner en marcha un nuevo proyecto que define como “un sueño personal y una oportunidad de mercado”. Este movimiento, adelantado por The Wall Street Journal, va acompañado de la salida de Ben Smith como columnista de medios de The New York Times para dirigir esa futura redacción.

El ya exconsejero delegado de Bloomberg Media considera que existe espacio para “un negocio de información premium que sirva periodismo sin sesgos a una audiencia global y proporcione una plataforma de alta calidad a los mejores periodistas del mundo”. Y el futuro director de ese proyecto apunta que “hay una gran audiencia que quiere periodismo que respete su inteligencia”. De momento no han trascendido más detalles sobre cómo será ese nuevo medio, que está en fase de desarrollo bajo el nombre Project Coda.

Justin Smith abandona la división de contenidos del gigante de la información financiera para poner en marcha un proyecto que aspira a servir periodismo sin sesgo a una audiencia global.

La salida de Justin Smith cierra un ciclo que comenzó en 2013, año en el que pasó a dirigir Bloomberg Media tras una andadura como presidente de The Atlantic en la que promovió la adaptación de la centenaria publicación al digital y lanzó Quartz. Durante su mandato la división se ha expandido de forma notable en áreas como los eventos o el vídeo, y también hasta alcanzar más de 350.000 suscriptores de pago que abonan en torno a 400 euros cada año. Quien le reemplaza es precisamente quien diseñó la exitosa estrategia de ese muro de pago, Scott Havens, que venía ocupando el puesto de responsable de Crecimiento y de Asociaciones Estratégicas.

Por su parte, Ben Smith deja The New York Times tras dos años en los que ha escrito una influyente columna sobre la industria de los medios. Previamente había sido director de BuzzFeed News durante otros ocho. En declaraciones al que todavía es su periódico ha indicado que “hay 200 millones de personas educadas en la universidad que leen en inglés, pero nadie les está tratando realmente como una audiencia. Es a quienes nosotros vemos como nuestra audiencia”.