Guardian Media Group prohíbe en sus medios los anuncios de compañías petroleras

| 30 ENERO 2020 | ACTUALIZADO: 31 ENERO 2020 9:05

Guardian Media Group (editor del diario británico The Guardian) no aceptará más anuncios de empresas que se dediquen a la extracción de combustibles fósiles. Una decisión efectiva desde principios de este año y que involucra a sus soportes en papel y digital.

El editor del grupo, Neil Berkett, comentó que llevaban cinco años haciendo muchos esfuerzos para tratar de desvincularse del sector energético más contaminante. «Esta medida se basó en los esfuerzos de muchas personas de nuestra industria en el pasado para evitar un problema climático significativo por parte de los gobiernos de todo el mundo».

En la práctica, esto significa que The Guardian ya no alojará publicidad de marcas como Shell y BP. Los primeros cálculos apuntan que el grupo podría sufrir un impacto de 500.000 libras anuales. Sin embargo, esta medida no afectará a más empresas que a las que se dediquen específicamente a este tipo de tareas contaminantes.

Por lo tanto, The Guardian continuará admitiendo anuncios de marcas en otros sectores, pero que también se consideran muy contaminantes, como los automóviles y las aerolíneas.

En una publicación reciente, la directora de atención al cliente, Anna Bateson, y la directora de ingresos, Hamish Nicklin, reconocieron que la medida no sería suficiente para muchos de sus lectores, considerados como progresistas.

Argumentaban que prohibir todos los anuncios de este tipo de compañías «sería un duro golpe financiero para nosotros y podría obligarnos a hacer recortes significativos en The Guardian y The Observer en todo el mundo».

También apuntaban que «las compañías petroleras de extracción de combustibles fósiles han perjudicado claramente la causa ambiental durante muchos años, como lo han demostrado nuestros propios informes y también los activistas ambientales”.

La medida del rotativo británico se produce tres meses después de que dos de las principales compañías artísticas del Reino Unido, la Royal Shakespeare Company y el National Theatre, pusieran fin a las asociaciones de patrocinio con BP y Shell, respectivamente.

Bateson y Nicklin dejaron claro que el movimiento no tenía la intención de ser crítico con la publicidad en general, que sigue siendo el mayor contribuyente de ingresos para The Guardian, a pesar de un esfuerzo significativo en los últimos años para aumentar las contribuciones de los lectores.

«Creemos que una buena publicidad, realizada de manera responsable, puede ser positiva para la economía y el mundo, además de proporcionar un sustento importante para el periodismo de The Guardian. Por lo tanto, continuaremos aceptando otras formas de publicidad mientras continuamos buscando sostenibilidad financiera a largo plazo para nosotros».

Apoyo de Greenpeace a la propuesta

Por su parte, Greenpeace, ha acogido de buen grado la medida de The Guardian. «Durante demasiado tiempo, los gigantes de este sector como BP y Shell, que son causantes de la emergencia climática, han podido salir en publicidad mientras invierten el 97% de sus negocios en petróleo y gas», comentaba Mel Evans, principal activista climático de Greenpeace en Reino Unido.

También dijo que «este es un momento decisivo, y The Guardian debe ser aplaudido por este movimiento para poner fin a la legitimidad estas empresas. Las empresas de petróleo y gas ahora se encuentran junto a las compañías tabacaleras como empresas que amenazan la salud y el bienestar de todos en este planeta».

Finalmente, Evans añadió que «otros medios de comunicación, organizaciones artísticas y deportivas deben seguir su ejemplo y poner fin a la publicidad y el patrocinio de compañías de este estilo».