La escasa propensión del consumidor español a pagar estanca el modelo de suscripción
En la prensa nunca es pronto ni tarde para seguir una dirección u otra. Sobre todo si tomando esa decisión se consigue plantear una alternativa a la desacostumbre de acudir al quiosco en busca de un periódico en papel, causa del desplome sufrido en la difusión y venta de los últimos años.
Desafortunadamente, en España la migración del papel al digital ha sido muy rápida -en los últimos años-, e incluso precipitada en algunos casos. Esto, unido a la escasa propensión del consumidor español a pagar por los contenidos informativos, dejan al modelo de suscripción varios pasos y niveles por detrás del de otros países.
En su reciente informe titulado ‘El auge de los modelos de pagos‘, Pepe Cerezo expone cómo fenómenos imprevistos como la victoria de Donald Trump o el Brexit han permitido consolidar esta estrategia en los últimos tiempos. Obviamente, en este crecimiento confluyen otra serie de factores, como son la reorganización de los procesos y estrategias de marketing digital, además de que se trata de una tendencia internacional.
«En España los muros de pago son la historia de sucesivos fracasos», comenta el autor a propósito de la reticencia de los usuarios de nuestro país a pagar por la información en Internet. Fracasó El País en los albores del nuevo milenio y terminó renunciando El Mundo a su apuesta por hacer de Orbit un modelo sostenible.
En nuestro país destaca, por el rendimiento económico logrado en este tiempo, eldiario.es, que en 2015 tuvo unas ganancias de 218.295 euros e ingresó 783.415 euros mediante las aportaciones de sus 14.231 socios
En la actualidad, son contados los medios que apuestan en España por hacer del modelo de pago su principal vía de ingresos. Si bien ninguno de ellos renuncia a un modelo mixto que permita bordear o alcanzar la rentabilidad por medio de la publicidad.
Destaca, por el rendimiento económico logrado en este tiempo, eldiario.es, que en 2015 tuvo unas ganancias de 218.295 euros e ingresó 783.415 euros mediante las aportaciones de sus 14.231 socios. Otro ejemplo es el de Infolibre, para el que la suscripción representó el 53% de su facturación total en 2016, según su último informe económico.
En cambio, un estudio elaborado por Media Breafing sobre esta misma cuestión se centra en El Español como modelo en la estrategia de suscripción, quizás porque presenta un muro similar al de medios anglosajones. Cierto es que es el único medio español que tiene en cuenta en una muestra de quince periódicos europeos, de los cuales cuatro son de Reino Unido, tres franceses, dos noruegos, dos alemanes, uno de Holanda, uno de Suiza y uno de Italia, además de El Español.
Según este estudio, “El Español se propuso adoptar un enfoque más agresivo para informar sobre política y negocios, pasando de lo que inicialmente fue un blog antes de la puesta en marcha oficial, a un medio digital “cross-platform” que emplea a 70 periodistas. Sus estimaciones iniciales eran, dada esa apuesta agresiva, concluir con un equilibrio entre ingresos procedentes de publicidad y los generados por suscripción, diferenciándose algo de otras estrategias de la prensa española en 2015, muy basadas aún en volumen de visitas y CPM».
Año y medio después de su lanzamiento, el objetivo de los 20.000 usuarios no está muy a la mano, puesto que la cifra actual ronda los 13.000; lo que supone mantener una dependencia importante de la pata publicitaria. No obstante, a día de hoy sólo se pueden leer 25 artículos al mes para los no suscriptores, una medida que no ayuda a atraer nuevos suscriptores, entra a valorar el informe. Asimismo, aunque en los últimos meses El Español ha protagonizado un ascenso considerable en cuanto a audiencia, el pasado febrero cayó hasta la octava posición del ranking de generalistas.
Esto a nivel local. En el ámbito de las cabeceras regionales, Vocento es el único de los grandes grupos que está explorando la vía del pago en El Correo, El Diario Vasco o El Diaro Montañes.