La radio, en horas bajas: su audiencia cae a mínimos de hace siete años
En un escenario marcado por el declive crónico de la prensa de papel y los cambios revolucionarios en los hábitos televisivos, la última ola del Estudio General de Medios (EGM) ha certificado que la radio perdió 739.000 oyentes de golpe y porrazo. Una auténtica sangría que, lejos de corregirse, amenaza con ir a mayores en las próximas oleadas.
Aunque la tendencia negativa viene de lejos, los datos de la radio nunca habían sido tan demoledores para la industria española. La audiencia general, tanto de las emisoras habladas como musicales, fue de 23,82 millones de oyentes entre los meses de abril y mayo. Esto es, un millón menos que hace un año, cuando se alcanzaron los 24,87 millones.
Se trata del consumo radiofónico más bajo de los últimos años. Para encontrar un registro peor hay que remontarse a 2011, cuando el dato global de oyentes fue de 23,1 millones. Para más inri, en todo este tiempo nunca se había producido un descenso tan acusado como en la última ola.
Sin duda este descenso repercute directamente en las emisoras, que han visto contraerse su audiencia de forma considerable. La que más COPE (-223.000 oyentes, como ya avanzó este diario), pero también la SER (-146.000), Onda Cero (-93.000) y RNE (-127.000). Como resultado de este descenso generalizado, 551.000 personas dejaron de escuchar la radio generalista.
Todos estos diagnósticos deberían bastar para poner en alerta a la industria, pero no parece que vaya a ser todavía. Por primera vez en mucho tiempo, la Cadena SER reservó un espacio en la nota donde destacaba su liderazgo para comentar «un descenso generalizado en el consumo de radio que se explica por un efecto de estacionalidad».
La inversión publicitaria crecerá un 2%
En el sector concluyen que los responsables de las emisoras comerciales no tomarán cartas en el asunto mientras se mantenga la inversión publicitaria en el medio radiofónico, que crecerá un 2% hasta final de año, de acuerdo con las previsiones de junio efectuadas por los panelistas de Zenthinela.
En el momento en el que la publicidad se frene y comience un camino de retirada, será cuando se revisará profundamente las estructuras de las parrillas de la radio, que se mantienen inalterables desde hace tres décadas. No obstante, algunos medios fían plazos más cortos y, en el caso de la emisora de Prisa, sostienen que sus responsables planean acometer un plan revolucionario de cara a la próxima temporada.
