Las grandes consultoras también acechan el negocio de las agencias creativas

| 18 JULIO 2017 | ACTUALIZADO: 19 JULIO 2017 9:00

Es sabido que las grandes consultoras multinacionales tipo Deloitte o Accenture están muy interesadas desde hace algún tiempo en expandir sus tentáculos hacia el sector publicitario.

En un principio, pusieron su objetivo en arañar cuota de mercado a las agencias de medios, por mucho que Martín Sorrell, CEO de WPP, pusiera de relieve la semana pasada las grandes diferencias entre ambas compañías. Pero ahora las agencias creativas también estarían amenazadas.

No en vano, Heat -agencia creativa de Deloitte- acaba de ganar la cuenta de Manulife, que opera bajo la marca de  John Hancock en Estados Unidos, después de 32 trabajando con una firma del Grupo Interpublic. «La creatividad de Heat fue, con mucho, la más fuerte», dijo Gretchen Garrigues, directora de Marketing de Manulife.

Mike Barrett, presidente de Heat, dijo que la agencia no estaba inicialmente en la competición, pero se enteró del proceso y pidió competir. «No existe una agencia de publicidad que conozca mejor la industria de servicios financieros que Deloitte».

La intención de la compañía es agitar la industria al más alto nivel y eso significa pelear por las grandes cuentas. Las consultoras cada vez están más presentas en la publicidad tradicional. «No estamos golpeándonos el pecho y diciendo: ‘Vamos a destruir las compañías tipo holding'», dijo. «Sólo tenemos algo diferente que creemos que merece consideración».

El primer trabajo creativo para Manulife del nuevo equipo está programado para el primer trimestre de 2018. Garrigues dijo que la compañía «está muy interesada en mejorar nuestro trabajo desde el punto de vista digital».

John Hancock gastó alrededor de 15,8 millones de dólares en Estados Unidos en medios durante 2016, según Kantar Media. Sin embargo, Garrigues se negó a revelar el presupuesto de marketing de la compañía, pero lo calificó como «significativo».

Aunque parte de la nueva estructura de la agencia es ayudar a Manulife y John Hancock a transformarse en una empresa más «centrada en el cliente», Garrigues comentó que dirigir los resultados del negocio a través de los esfuerzos de marketing es la clave.

La compañía también quiere alinear mejor Manulife y John Hancock a nivel mundial. «Tenemos la oportunidad de aprovechar las sinergias de esas marcas en todo el mundo y hacer uno más uno igual a cinco en lugar de dos», dijo Garrigues.