Google se pone al día con Hacienda pagando 9 millones de euros, 3 de ellos tras una inspección fiscal

| 5 MARZO 2019 | ACTUALIZADO: 6 MARZO 2019 8:57

La facturación de Google en España aumenta año a año, aunque los estados contables lo hacen a un ritmo muy inferior a lo que se estima realmente. La filial española de la tecnológica declaró unos ingresos de apenas 96 millones de euros en el ejercicio 2017, cuando su facturación publicitaria se estima en más de 800 millones en nuestro país.

No en vano, la cifra de negocio declarada por Google en sus últimas cuentas presentadas en el Registro Mercantil reflejan un aumento de 4 millones de euros respecto al 2016, es decir, un 4% más. Ese año facturó 92,3 millones de euros gracias al incremento en el precio y volumen de los servicios que presta a su matriz irlandesa.

Así, de los 96 millones de euros ingresados por Google Spain, el 98% corresponde a la prestación a Google Irlanda de servicios de márketing y soporte, mientras que el otro 2% (2 millones) proceden de la actividad de I+D que realiza para la matriz estadounidense.

Pese al aumento en la facturación, el resultado declarado por la compañía empeoró, puesto que sus ganancias pasaron de los 19,5 millones de euros en 2016 a los 15,9 millones en 2017. Este recorte se debió, principalmente, a sus obligaciones fiscales, que le llevaron a abonar 9 millones de euros en impuestos sobre el beneficio. 

Se trata de la factura más alta pagada por la firma tecnológica a la Hacienda española hasta la fecha. Tal y como recoge en su memoria, casi un tercio de este importe (2,7 millones de euros) fueron reclamados por el Fisco a cuenta de la inspección que mantenía abierta por el Impuesto de Sociedades correspondiente a los ejercicios que van desde 2011 hasta 2015. A esta cantidad se sumaron otros 321.000 euros por intereses de demora.

La Agencia Tributaria ya le exigió en 2013 1,9 millones de euros por el mismo motivo. Además de estas investigaciones, Google todavía tiene abierto a revisión el impuesto sobre Sociedades y del IVA de 2016. Las cargas correspondientes al 2017 fueron de 6,5 millones de euros, de los que 5,2 ya habían sido abonados previamente a Hacienda.