La misteriosa presencia de Snapchat en el Festival de Cannes

Las grandes compañías tecnológicas y medios sociales tuvieron una presencia muy activa la semana pasada en el Festival de Cannes. Desde hace algunos años, Facebook, YouTube o Twitter son uno más en este evento publicitario. De hecho, suelen suelen alquilar desde cabañas en la playa hasta plantas enteras en hoteles de lujo, pasando por yates amarrados en la Costa Azul; para tener sus reuniones con directivos de la industria publicitaria.

La excepción ha sido este año Snapchat, compañía que destaca, entre otros motivos, por su secretismo, propiciado por su CEO, Evan Spiegel (25 años).

La presencia de esta compañía en Cannes ha estado rodeada de secretismo. Según Recode, alquilaron un chalet de lujo al que era imposible aproximarse, rodeado por grandes arbustos y cuyas puertas estaban franqueadas por fornidos vigilantes de seguridad. El único distintivo que indicaba que aquel era el cuartel general  de Snapchat en Cannes durante la semana pasada es la valla, que incluía el logo de la red socuial.

Irónicamente, a pocos metros de esta localización, la red social había instalado el cartel publicitario más grande del Festival.

Pese a este interés en mantener en secreto su presencia en Cannes, parece ser que Snapchat dio una gran fiesta el miércoles por la noche, a la que acudieron relevantes directivos de agencias, además del propio CEO de la compañía, según desvela Adweek.

Además de ello, su director de estrategia, Imran Khan, también se habría desplazado a la ciudad francesa; acompañado de un buen número de comerciales de Snapchat.

La publicación especializada Adweek apunta que este aura de misterio sería una estrategia de marketing de Snapchat. El objetivo, según el medio, sería hacer ver que son las empresas las que van a ver a Snapchat y no la propia compañía la que necesita esos encuentros. De momento, este planteamiento ha dado sus réditos en cuanto a impacto en medios especializados, pues Recode, Adweek y Digiday han publicado noticias sobre su presencia misteriosa en Cannes.