
Accionistas españoles de Prisa garantizan la financiación inicial del proyecto televisivo
El proyecto televisivo que Prisa tiene previsto lanzar este año tiene encarrilada su financiación inicial. Una parte de los accionistas españoles de la editora de El País —que representa más de un 15% del capital— ha aceptado invertir en la nueva televisión, según ha podido saber DIRCOMFIDENCIAL.
Prisa cuenta de momento con un compromiso de financiación por parte de Global Alconaba (7,1% de Prisa), representados por Andrés Varela Entrecanales; el empresario valenciano, Adolfo Utor, dueño de Balearia (5,4%) y el empresario andaluz Diego Prieto (3,1%), a la espera de confirmar otros posibles respaldos financieros de inversores españoles e internacionales.
Los otros grandes accionistas españoles, Rucandio, de la familia Polanco (7,6%) y Banco Santander (4,8%), no se han manifestado al respecto, según fuentes de la cúpula directiva.
Global Alconaba, Adolfo Utor (Balearia) y Diego Prieto se han comprometido a invertir en el proyecto, sin involucrar financieramente a Prisa.
En todo caso, el grupo editor ya da por controlada la parte financiera del proyecto, tras descartar la posibilidad de que fuera la propia empresa la que asumiera la inversión, sepultada por una deuda superior a los 830 millones de euros.
La idea es que Prisa, eso sí, participe aportando servicios corporativos, recursos propios y contenidos originales producidos por Prisa Video, dirigida por Fran Llorente, y Lacroproductora, por María Jesús Espinosa de los Monteros.
El proyecto televisivo orquestado por José Miguel Contreras ya está trabajando en la configuración final de la sociedad que acudirá en las próximas semanas al concurso de licitación convocado por el Consejo de Ministros para conceder una nueva licencia de televisión (TDT).
Desde Prisa se están sondeando nombres de periodistas o comunicadores a quienes se les propondría formar parte del nuevo canal, que estará centrado en programas de actualidad. De hecho, ya están manteniendo numerosas conversaciones con algunos de ellos, antes de la constitución de la sociedad y de que el Gobierno dé luz verde al concurso de licitación.