Apagón

España reaviva el poder de la radio en un nuevo día histórico de los transistores

| 29 ABRIL 2025 | ACTUALIZADO: 30 ABRIL 2025 21:55

Cuarenta y cuatro años después del 23-F, episodio que mantuvo en vilo a todo un país conectado a las ondas, que pasaría a conocerse como «la noche de los transistores», la radio analógica ha vuelto a hacer historia, con la particularidad de lograrlo en la era digital.

El apagón masivo sufrido ayer en España provocó que miles de ciudadanos desempolvaran de sus cajones este dispositivo olvidado o se dirigieran apresuradamente a comercios para adquirirlo, en unos casos sin éxito por agotamiento de existencias, en otros, asumiendo un reprochable precio. Los oyentes más veteranos, familiarizados con este objeto, los más alejados del podcast, las redes sociales y el streaming, ayer sirvieron de faro a los jóvenes que defienden pertenecer a la generación mejor conectada. Una de las estampas más repetidas en las calles fue la de corrillos de personas alrededor de un centenario aparato.

Jorge Bustos.

La jornada sin precedentes de ayer sometió a un duro examen a quienes día a día hacen la radio. El reconocido periodista Jorge Bustos, presentador de Mediodía COPE, se puso al frente del micrófono tras el corte eléctrico para dirigir un informativo especial. En declaraciones a DIRCOMFIDENCIAL explica lo siguiente: «Después del apagón de ayer, quedó claro que lo que hace única a la radio es su cercanía con las personas. En un momento en el que todo fallaba, fue la voz que unió a vecinos en calles, bares y hogares, ofreciendo información clara y directa. No es solo un medio, sino el canal que sigue presente cuando más se necesita, aportando la inmediatez y tranquilidad necesarias en situaciones de incertidumbre como la que vivimos ayer».

Jorge Bustos (COPE): «La radio aporta inmediatez y tranquilidad, necesarias en situaciones de incertidumbre».

Su matriz, Ábside Media, cuenta con dos generadores: uno para COPE y otro para TRECE, aunque el problema de la televisión es que en muchos hogares no se podía encender. Sus depósitos eléctricos les permiten aguantar sus emisiones de manera autónoma un máximo de 72 horas aproximadamente; de hecho, en alguna ocasión puntual han tenido que recurrir a estas. Ante los temores sobre la imprevisible duración del apagón, el equipo de la radio decidió extraer combustible de unidades móviles para garantizar la continuidad de las ondas. «Todos nuestros técnicos de zona, estuvieron pendientes de que no hubiese incidencias y que el sistema funcionaba como debía», defienden desde COPE.

Carlos Alsina.

«Fue una sorpresa general cuando desapareció la electricidad en toda la redacción. Nunca en 30 años había pasado algo así«, cuenta a este diario la subdirectora de Informativos de Onda Cero, Ester Turu. Esta profesional de la cadena de Atresmedia Radio relata que una de las mayores sorpresas que se llevó fue la de «comprobar la calma en la redacción pese al caos que estábamos detectando».

Ester Turu (Onda Cero): «Nunca en 30 años había pasado algo así».

Tras esos primeros segundos de incertidumbre de las 12:35 h., el equipo decidió organizarse para ofrecer al oyente la información de última hora, sin guiones y un estrecho contacto con la calle durante 11 horas ininterrumpidas. «Las dificultades fueron técnicas. Los redactores, les pillara donde les pillara, tenían algo que contar. Ayer se volvió a la esencia básica de la radio», concluye.

Carles Francino y otros periodistas de La SER.

La Cadena SER también emitió un programa especial orquestado por sus primeros espadas. Su director técnico, Augusto Molina, responde que al principio «pensábamos que era un corte de los que ocurren de vez en cuando, así que comprobamos nuestros sistemas de emergencia». Detectaron que «todo funcionaba correctamente», gracias a sus dos alimentaciones de red eléctrica, soportadas también con un grupo electrógeno de emergencia.

Augusto Molina (SER): «Estuvimos recorriéndonos Madrid para poder llenar unas garrafas de gasoil».

Media hora después del apagón, y tras confirmar que el corte también había afectado al resto de España y Portugal, se encendieron las alarmas. «Nos preocupamos porque eso no se repone tan fácilmente». «Durante toda la jornada, se mantuvo la emisión gracias a que tenemos grupos electrógenos de soporte que consumen gasoil. Teníamos que repostar, pero no había forma de circular, las gasolineras no tenían electricidad para los surtidores, así que estuvimos recorriéndonos Madrid hasta llegar a Alcobendas, donde llenamos unas garrafas y fue lo que nos sirvió para repostar los grupos electrógenos. Así pudimos aguantar hasta las 23:30 horas, cuando ya volvió la luz a la sede central de Gran Vía», explica.

La modalidad analógica fue la reina de un medio que cada día consumen 32,3 millones de personas, lo que representa tres cuartas partes de la población mayor de 14 años, según el último Estudio General de Medios, presentado la semana pasada. Un medio que vuelve a recibir ovaciones por su elevada capacidad de adaptación a los retos y confianza que inspira en tiempos inciertos.