La FAPE alerta contra el plan del Gobierno: «dice más por lo que calla que por lo que expresa»

La salud de los medios de comunicación preocupa al conjunto de asociaciones de periodistas. Tanto es así que el presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), Nemesio Rodríguez, se ha mostrado partidario a un plan de ayudas para los medios, tal y como ya hiciera al inicio de la pandemia a raíz del salvavidas demandado por AMI, AERC y UTECA.

«No entiendo cómo el Gobierno no ha considerado un servicio esencial durante la pandemia y ahora se muestra reticente a aplicar un plan de ayudas a la prensa que asegure la supervivencia de la que es uno de los pilares de las democracias”, manifestó Rodríguez en un encuentro organizado por Nueva Economía Forum. Declaraciones que vienen motivadas por la delicada situación que atraviesa la profesión.

En este sentido, señaló que la fusión de algunos medios, el cierre de otros y los despidos de periodistas son previsibles consecuencias tras la crisis que ha causado la COVID-19. «Algunos medios ya han empezado con los ERE, y que se va a agravar cuando se cierre la posibilidad de seguir con los ERTE en las empresas informativas», avisó recordando que durante la anterior crisis se perdieron cerca de 13.000 puestos de trabajo.

Una realidad que da al traste con los mejores deseos del propio Rodríguez, quien hace tiempo confiaba en que los despidos temporales no se convirtiesen en definitivos por el azote de la crisis. «Cuando aún no nos hemos recuperado del todo de la anterior crisis, llega la segunda, que traerá una mayor precarización que la ya existente», manifestó en declaraciones a este medio sobre la posibilidad de nuevas reestructuraciones en el sector.

No obstante, la principal cuestión que centró el encuentro digital fue el procedimiento de actuación del Gobierno contra las conocidas como fake news o desinformación. En opinión del presidente de la FAPE, el plan «peca de poca claridad mucha ambigüedad. Dice más por la que calla que por lo que realmente expresa».

Tras las fuertes críticas de la industria al plan del Gobierno, que entre varios niveles de actuación, contempla examinar “la libertad y el pluralismo de los medios de comunicación”, Rodríguez señaló que «debería haber hecho una campaña previa o una presentación para que los periodistas pudiéramos preguntar y repreguntar sobre este procedimiento». «Esta falta de claridad es la que ha suscitado mayor preocupación», destacó antes de añadir que habrá que estar muy «atentos a como evoluciona»:

Sobre esta cuestión, Fernando González Urbaneja, expresidente de la APM y de la FAPE, planteó la posibilidad de que el Tribunal Constitucional se pronuncie sobre la orden para luchar contra la desinformación, aunque las organizaciones profesionales de periodistas no pueden solicitarlo. No obstante, cree que el tema no tendrá un gran recorrido.

No es un debate menor. Rodríguez sostuvo que la lucha contra la desinformación debe ser librada de forma colectiva, ya sea desde el periodismo, aplicando «los principios que han forjado esta profesión», o la política. «En lugar de pensar en comités debería pensar en la alfabetización mediática, que es imprescindible desde edades tempranas».

Respecto a la regulación de los medios de comunicación, el presidente de la FAPE aclaró que el colectivo cuenta con la Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología del Periodismo como órgano de autocontrol deontológico interno de la profesión periodística. «Nosotros creemos que la profesión de periodista está mejor autorregulada que regulada«, ha subrayado. «El único problema es que los medios no le hacen mucho caso a los dictámenes».