La plantilla de COPE recupera su poder adquisitivo tras consolidar el beneficio
Las buenas noticias nunca vienen solas. Y si no que se lo pregunten a los trabajadores del Grupo COPE, que a partir de este mes de junio recuperan las condiciones salariales previas a la crisis económica. Y ello gracias a la racha de tres ejercicios en positivo que encadena la editora de Cope, Cadena 100 y Rock FM.
Casualmente, el inicio de este periodo de bonanza económica coincide con la llegada de Carlos Herrera a la emisora de la Conferencia Episcopal. El locutor andaluz fichó en 2015, en un momento en el que COPE atravesaba un profundo bache de 23 millones de euros, y al término de su primer año completo -2016- se cerró en números negros.
Los beneficios de ese primer año, que fueron de 4,1 millones de euros, ya repercutieron positivamente en el bienestar de una plantilla que venía de arrastrar una situación complicada. Entonces recuperaron un 20% del recorte aplicado en su nóminas, que rondaba el 7% de media; el 11% en lo tramo de sueldo más altos y el 4% en los inferiores. La rebaja se pactó a cambio de no realizar despidos.
Aunque en 2017 se firmaron unas ganancias de 6,5 millones de euros, los trabajadores han tenido que esperar al final de la primera parte del 2019 para ver restablecido completamente su poder adquisitivo. Es el acuerdo al que llegaron sindicatos y empresa tras la renovación del convenio colectivo de la emisora, firmado ese mismo año.
Así, una vez consolidados los beneficios, desde el pasado 1 de junio COPE da por liquidada la deuda que mantenía con la plantilla. No obstante, el pasado mes de diciembre ya les fue abonado un anticipo a través de un plan social que tuvo un impacto de cuatro millones -sobre el beneficio-. Fuentes de la cadena dan cerrada por tanto una de las etapas más negras del medio.