Las cadenas de televisión se dejaron un 45% de sus ingresos publicitarios durante el segundo trimestre
Los meses más duros de la pandemia y su confinamiento asociado coincidieron con un repunte en el consumo televisivo en España, pero también con una histórica caída del 45% en ingresos publicitarios respecto al mismo periodo del año anterior. Según los datos publicados por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), la planificación quedó entre abril y junio en 318 millones de euros, frente a los 474 de 2019.
El detalle de las cifras deja como principales perjudicadas a las televisiones privadas, que facturaron un 31% menos. Atresmedia (43% de la inversión) y Mediaset (37%) son las que más acusaron el golpe, al concentrar en conjunto más del 80% de toda la planificación. Pero este predominio comercial no se correspondió con los datos de audiencia, ya que ambas sumaron un 55% de cuota de pantalla. Telecinco y Antena 3 fueron los canales más vistos, por delante de TVE.
Por su parte, los ingresos publicitarios de las televisiones públicas sufrieron un retroceso del 29% y los de las emisoras de pago mantuvieron mejor el tipo, con un 23% de caída. En este último segmento los descensos de facturación oscilaron entre el 10% de las televisiones IP y el 29% de las que emiten vía satélite, con las de cable a medio camino con una disminución del 20%. En total la cifra de abonados a televisión de pago llegó a los 7,9 millones en el segundo semestre, y 4,7 de ellos corresponden a los servicios IP.
Estos datos se dieron en un contexto de aumento de consumo, con hasta 246 minutos por persona y día. Esa cifra refleja un aumento de 15 minutos sobre el trimestre anterior y 39 sobre el mismo periodo del año pasado, lo que muestra el desfase entre aumento de audiencia y caída de ingresos que padecieron igualmente los medios digitales.
Ya en marzo el Gobierno había aprobado una compensación de 15 millones de euros para televisiones privadas, que posteriormente fue retirada. Pero después compensó parte de esa cantidad perdida mediante una subvención de 10 millones para sufragar parte de los costes por liberar el segundo dividendo digital. Según el Real Decreto que la regula, Mediaset y Atresmedia se quedarían prácticamente la mitad de ese dinero, y el resto de canales nacionales, autonómicos y locales se repartirían la otra mitad.