Junta general de accionistas de 2016 de Vocento. Foto: Ignacio Pérez.

Las eternas diferencias entre Enríquez y Bergareche agotan la paciencia del consejo de Vocento

| 5 NOVIEMBRE 2018 | ACTUALIZADO: 6 NOVIEMBRE 2018 9:23

Renacen las tensiones internas en el seno de Vocento. Las profundas (y eternas) diferencias entre Santiago Bergareche y Luis Enríquez, presidente y consejero delegado del grupo, respectivamente; han llegado a un punto de no retorno. Se ha llegado a esta situación después de que el primero tratara, sin éxito, de destituir al máximo responsable de la compañía, pese a que el pasado abril fue ratificado en el cargo.

Según informó recientemente El Confidencial, Bergareche, que hace unos meses perdió el apoyo de Miguel Antoñanzas y Fernando Azaola en el órgano ejecutivo, ha planteado en los tres últimos consejos de administración el cese de Luis Enríquez. Desde la primera acometida, acaecida antes del verano, a la última, hace apenas dos semanas, la propuesta ha ganado empaque, aunque en ninguno de los encuentros ha prosperado.

Como fuere, el movimiento del actual presidente ha bastado para hacer saltar por los aires la frágil paz social del consejo de Vocento. En este sentido, Vozpópuli señalaba hace unos días la división entre accionistas por la evolución del negocio, que en los últimos años ha virado hacia la diversificación mediante el refuerzo del área publicitaria o la adquisición de Madrid Fusión.

Las fuentes consultadas por este medio apuntan que las históricas tensiones entre los dos primeros espadas de la editora de ABC han terminado por agotar la paciencia del Consejo. Es más, añaden que con la que está cayendo dentro y fuera de la casa es insostenible mantener un órgano fragmentado.

A este respecto, los accionistas han llegado a plantear tres escenarios posibles de cara al Consejo extraordinario convocado para esta semana, los cuales irían desde la salida pactada de ambos directivos al ceses de uno u otro. Visto el clima de tensión reinante, algunos no descartan un relevo al frente de la compañía que permita dejar atrás esta situación, si bien otros confían en reconducirla. En cualquier caso, unos y otros aspiran a poner orden en Vocento para trabajar de una vez por todas en el futuro de la compañía.