Mediaset y Atresmedia buscan apoyo en la muleta de la diversificación
La televisión ya no es lo que era. Atresmedia y Mediaset, los dos grandes grupos de televisión en España, presentaron la semana pasada su facturación más baja de los últimos años.
Mientras que el primero presentó unos ingresos netos de 671,5 millones de euros hasta septiembre, (-3,5%), el segundo declaró 660,7 millones (-5,1%). El pinchazo se concentró en su negocio publicitario en la pequeña pantalla, que cayó una media del 6% entre ambos grupos.
Con la publicidad catódica en barrena lastrando sus cuentas de resultados y su cotización en abrupta caída desde hace más de un año, hace tiempo que ambas compañías trabajan en ampliar sus vías de negocio complementarias con el fin de limitar la exposición a los vaivenes del mercado televisivo.
La estrategia del llamado duopolio televisivo se basa en la diversificación del negocio en el corto plazo. Así lo evidencia por ejemplo el que, de un tiempo a esta parte, hayan pasado a definirse como grupos multimedias, aun cuando la aportación del resto de divisiones es todavía muy pequeña en comparación con la televisión.
Los avances por lograr una base de negocio digital lo suficientemente amplia son lentos, pero continuados. En este sentido, Atresmedia lleva ventaja a su histórico rival. Al cierre del tercer trimestre del año, casi una quinta parte de los ingresos generados por la editora de Antena 3 y La Sexta provenían de fuentes como la radio, Internet o el cine.
Por concepto, el grupo con sede en San Sebastián de los Reyes facturó 32,6 millones de euros por publicidad digital entre enero y septiembre, lo que representa un incremento interanual del 8,1%. La producción y distribución de contenidos audiovisuales alcanzó los 51,2 millones de euros, frente a los 48,7 millones del año anterior, es decir, un 5,1% más. Este segmento es el que mejor rendimiento tiene desde hace tiempo, gracias en parte a la venta de series a plataformas.
Casi una quinta parte del negocio de Atresmedia procede de actividades ajenas a la publicidad televisiva
En tercer lugar la parte de otros ingresos, que incluyen principalmente eventos, licencias y derechos editoriales, aportó 28,1 millones de euros, un 28,3% más que hace un año. En conjunto, todas estas líneas de actividad sumaron 111,9 millones de euros, una quinta parte de la actividad publicitaria en televisión (559,5 millones) y casi el 17% del negocio total.
En comparación, Mediaset lleva menos camino recorrido que su rival, aunque bancos inversores como Merrill Lynch sostienen que la diversificación supone cruzar el Rubicón para uno y otro. En su caso la línea de otros ingresos reportó 44,2 millones de euros, cifra que equivale a un incremento del 12,9%.
La filial española de Mediaset incluye dentro de este aportado los ingresos de su actividad cinematográfica, Internet o venta de derechos. Según informó la compañía, desde julio también hace contabilizaba el contrato de servicios con el canal Real Madrid TV y los ingresos de las suscripciones a la plataforma OTT Mitele Plus. A la fecha del citado informe financiero, las suscripciones de Mitele Plus superaban las 90.000.
