Régimen de austeridad en la APM por los efectos del coronavirus
Las consecuencias económicas derivadas del coronavirus pasan factura a la Asociación de la Prensa de Madrid (APM). La crisis sanitaria ha provocado una considerable reducción de sus ingresos, cifrada en 244.000 euros, los cuales representan cerca del 5% de la facturación anual.
Esta pérdida de ingresos deriva de la supresión de la tradicional Corrida de la Prensa por San Isidro, la reducción de los patrocinios, la bajada de los ingresos de los asociados por la moratoria de las cuotas o de los alquileres. Y es que una las primeras medidas adoptadas por la asociación ante la expansión del virus fue la suspensión del pago de cuotas entre los socios afectados económicamente.
Como consecuencia de este impacto, la junta directiva de la APM se ha visto obligada a implementar un régimen de austeridad basado en la reducción de todas las partidas de gastos. De ese modo, en estas semanas se han revisado los contratos de suministros, reducido los gastos de oficina y las partidas destinadas a la asesoría y ejecutado un ERTE. Este proceso ha supuesto una reducción del 25% de la jornada laboral para toda la plantilla. También se ha modificado el acto de entrega de los Premios APM de Periodismo a la espera de que se normalice la situación.
La aplicación de este plan se expuso en el transcurso de las Asambleas Generales Extraordinaria y Ordinaria de la APM celebrada el pasado 29 de junio, en la que se aprobó el informe de gestión y las cuentas de 2019. Según informó Miguel Ángel Noceda, vicepresidente de asuntos económicos, la asociación cerró el ejercicio con un déficit de 8.615 euros, frente al resultado positivo de 67.229 euros logrado en 2018.
Este giro a los números rojos se debió al aumento en el gasto, que ascendió a 5,7 millones de euros, un 3,5% más. Los ingresos fueron de 5,7 millones de euros, en línea con los del 2018. Al margen de las cuotas, se aprobaron unas nuevas cuotas para desempleados y jóvenes periodistas, ya que el aumento del censo es el principal objetivo de la actual junta directiva, presidida por Juan Caño. En 2018 se logró estabilizarlo tras haber perdido un 30% de los asociados en los últimos años a raíz de la supresión del seguro médico.